Peña Nieto anuncia plan de seguridad mientras aparecen cuerpos decapitados

Caribbean Digital

México. EFE.- El presidente Enrique Peña Nieto reveló este jueves su nuevo plan de seguridad para México en respuesta a las protestas por la desaparición de 43 estudiantes en Guerrero, el mismo día en que fueron hallados 11 cuerpos decapitados en ese estado.

Enrique Peña Nieto. AFP PHOTO/Alfredo ESTRELLA
Enrique Peña Nieto. AFP PHOTO/Alfredo ESTRELLA

Peña Nieto anunció una serie de medidas orientadas a frenar la infiltración del crimen organizado en los municipios de todo el país en un mensaje a la nación desde el Palacio Nacional, sede del Ejecutivo, que generó escepticismo de la oposición.

Dejó claro que los estados con mayor debilidad institucional son Guerrero, Jalisco, Michoacán y Tamaulipas, donde centrará los esfuerzos en una primera etapa.

Señaló que como ciudadano comparte “la exigencia de justicia de la sociedad” ante lo sucedido en el municipio de Iguala (Guerrero), donde los 43 estudiantes de una escuela rural para maestros desaparecieron a manos de policías locales y miembros del crimen organizado.

También anunció que el lunes presentará al Congreso tres reformas constitucionales, una para crear policías únicas en los 32 estados del país, otra para combatir la infiltración del crimen organizado en las alcaldías y una más para definir la competencia de cada autoridad en la lucha contra el delito.

Entre las medidas figura igualmente un mayor despliegue de tropas en la región de Tierra Caliente, en Guerrero y Michoacán, y respaldo para los municipios que lo requieran en Jalisco y Tamaulipas.

El gobernante reveló, asimismo, la creación de tres zonas económicas especiales que abarcan Guerrero, Michoacán, Chiapas y Oaxaca, los estados más pobres del país, a través de una iniciativa legal que será enviada al Congreso en febrero de 2015.

El objetivo es alentar la inversión y la creación de empleos bien remunerados con infraestructura moderna, condiciones de seguridad, facilidades adicionales para el comercio exterior, así como descuentos en impuestos y contribuciones, explicó.

Los principales partidos de oposición anunciaron que evaluarán a fondo la política de seguridad presentada por Peña Nieto, pero de entrada señalaron deficiencias.

El presidente del izquierdista Partido de la Revolución Democrática (PRD), Carlos Navarrete, dijo que las medidas anunciadas “deben ser las primeras de muchas otras”, y afirmó que su agrupación participará “activamente en el proceso legislativo para mejorar sustancialmente las iniciativas del Ejecutivo”.

Respecto a los operativos especiales anunciados para la región de Tierra Caliente, en los estados de Guerrero y Michoacán, consideró que es necesario ampliarlos a municipios del Estado de México.

“En materia de combate a la corrupción, lo anunciado es notoriamente insuficiente. El agravio que existe en el país debe tener una respuesta más contundente. Hacen falta otras medidas al respecto”, sostuvo.

A su vez, el líder del conservador Partido Acción Nacional (PAN), Ricardo Anaya, declaró que su agrupación “no dará un cheque en blanco” a Peña Nieto sin analizar su propuesta a profundidad.

“Acción Nacional irá haciendo pública su postura detallada sobre cada uno de los temas propuestos, y señalará con toda puntualidad las omisiones identificadas, incluyendo desde ahora la falta de un ejercicio serio de autocrítica en el mensaje”, acotó.

Por su parte, organizaciones civiles señalaron que las medidas anunciadas son “insuficientes” y “desesperadas”, ya que llegan tarde y motivadas por la crisis desatada por la desaparición de 43 estudiantes.

“Son absolutamente cosméticas y desesperadas, están tratando de maquillar el cadáver que se ha vuelto el Estado”, dijo a Efe el poeta Javier Sicilia, líder del Movimiento por la Paz con Justicia y Dignidad.

“El problema es que el Estado está corrompido de pequeñas mafias, delincuentes, sindicatos clientelares, la pobredumbre que nos ha acompañado siempre” y por eso lo necesario es la “refundación del Estado”, apuntó.

El anuncio de Peña Nieto se produjo en una nueva jornada de violencia, tras el hallazgo de los cuerpos decapitados y con signos de calcinación de once jóvenes en un camino entre los poblados de Chilapa de Álvarez y Ayahualulco, en Guerrero.

Fuentes de la fiscalía estatal dijeron a Efe que los cadáveres fueron abandonados después de un enfrentamiento la noche del miércoles entre Los Rojos y Los Ardillos, dos grupos antagónicos del crimen organizado.

Un equipo de la Procuraduría General de la República (PGR, fiscalía nacional) viajó a la zona para investigar los hechos y determinar si la institución asume el caso.