Apetecida Alcaldía de Santiago ya tiene varios pretendientes

José Alfredo Espinal

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 Santiago.-  A pesar de que aún faltan aproximadamente tres años para la apertura formal de la campaña electoral en el país, la apetecida alcaldía de este municipio ya tiene varios pretendientes que son promovidos por la dirigencia interna de los principales partidos políticos del sistema.

Algunas fuentes señalan que por el gobernante Partido Revolucionario Moderno (PRM) y por el principal opositor Partido de la Liberación Dominicana (PLD) estarían participando por cada partido dos precandidatos a la alcaldía.

 Ulises Rodríguez, director general del Centro de Desarrollo y Competitividad Industrial (Proindustria) y Andrés Cueto, gerente general de Edenorte,  competirían por la candidatura en representación del PRM, mientras que el exsenador Julio César Valentín y el actual diputado Víctor Fadul se enfrentarán a lo interno del PLD.

De vencer a Cueto, Rodríguez sería nuevamente candidato a ocupar el Ayuntamiento,  el cual estuvo en el pasado proceso electoral estuvo a punto de alzarse con la victoria.

Julio César Valentín

Ulises Rodríguez mantiene sus vínculos y liderazgo con la base perremeísta de esta ciudad, así como con otros sectores de la sociedad civil que son determinantes para sus aspiraciones a la sindicatura.

Mientras que por el PLD el camino está despejado para el enfrentamiento entre Valentín y Fadul, debido a que es prácticamente un hecho que el alcalde Abel Martínez iría por la candidatura presidencial de su partido.

Las fuentes también indican que el exconcejal Rafael-Papito-Cruz volvería a aspirar a la sindicatura por el Partido Reformista Social Cristiano (PRSC). En lo que respecta a los partidos Revolucionario Dominicano (PRD) y la Fuerza del Pueblo (FP), los aspirantes serían el exdiputado Geovanny Tejada y el exdirector general de la Corporación del Acueducto y Alcantarillado de Santiago (Coraasan), Hamlet Otáñez, respectivamente.

El Ayuntamiento de este municipio siempre ha sido un deseo de los partidos políticos poder controlar por la cantidad de empleos directos e indirectos que dispone, además de los recursos que maneja.