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Rusia responderá al embargo sobre los suministros de su petróleo por parte de la Unión Europea (UE) y la introducción de un límite de precios a su crudo, manifestó este lunes el portavoz del Kremlin, Dimitri Peskov.
«La decisión (sobre medidas de respuesta) se está preparando. Desde luego hay algo que es evidente: no vamos a reconocer ningún tope», sostuvo Peskov, en su rueda de prensa telefónica diaria.
«La economía de la Federación Rusia tiene todas las capacidades necesarias para responder por completo a las necesidades y requerimientos de la operación militar especial. Estas medidas no tendrán impacto», declaró el portavoz.
Agregó que tanto el precio tope como el embargo europeo a los suministros de crudo ruso por barco, que también entró en vigor, modificarán el mercado energético mundial.
Un embargo sobre los envíos de petróleo ruso por mar a la UE entra en vigor este 5 de diciembre.
Los países comunitarios también acordaron un tope de precios regulado de 60 dólares por barril para el crudo ruso entregado por vía marítima.
Una decisión similar la anunciaron los países del Grupo de los Siete y Australia.
El Kremlin avisó de que no entregará más petróleo a los países que adopten el mecanismo del tope de precios, una posición que el domingo reiteró el viceprimer ministro encargado de Energía, Alexander Novak.