Domingo Hernández
Ayer fue un día histórico para la República Dominicana en el ámbito deportivo.
La elección de Adrián Beltré al Salón de la Fama de Cooperstown tiene una repercusión extraordinaria no sólo a nivel nacional en lo que respecta al deporte, sino también al de toda América Latina.
Esto así, porque con la llegada de Beltré, uno de los más calificados tercera base que ha pasado por las Grandes Ligas, al nicho de los inmortales, en donde muy pocos llegan, se eleva considerablemente el prestigio del béisbol dominicano y, consecuentemente, el de Latinoamérica.
Que conste, la suya no fue una simple elección, ya que la misma adquiere una connotación especial,si se toma en cuenta que lo hizo con mayor votación para un jugador nacido en Dominicana y una de las mejores de cuentos han sido electos (95.1 por ciento, obtuvo 366 votos del total de 394 emitidos).
Esta distinción, que lo convierte en el quinto dominicano en lograrla, si bien se esperaba, debe ser motivo de regocido nacional, en razón del tipo de atleta ejemplar que ha sido siempre Beltré dentro y fuera del terreno de juego –además un hombre humilde-, por la importancia de este logro y por lo mucho que significa el béisbol para los dominicanos, nuestro deporte rey que, es oportuno recordar,forma parte intrínseca de nuestra cultura.Nuestras felicitaciones, pues, a este gran dominicano.
La final y la fanaticada…
Es cierto que los Tigres del Licey junto a las Aguilas Cibaeñas son los equipos que tienen la mayor cantidad de fanáticos en nuestro béisbol.
Sin embargo, si se hace una encuesta y se evalúa de manera minuciosa en torno a cuál equipo tiene más fanáticos en esta final entre Licey y Estrellas Orientales, es casi seguro que este último conjunto sale ganando. Y por mucho.
Ocurre que los fanáticos de las Aguilas -y posiblemente lo de los otros equipos, es decir, Toros del Este, Gigantes del Cibao, y Leones del Escogido- se han sumado a favor de las Estrellas. Es decir, los orientales son favoritos sentimentales para ganar este serie.
Y eso se ha puesto de manifiesto en los propios estadios y en las calles, a nivel de pueblo. Las simpatías se han volcado a favor de las Estrellas, en términos generales. Ello indica que, ¡Es el Licey contra todos!
Hay que reconocer, sin embargo, que dentro del terreno sólo están los jugadores de estos dos equipos y que esta inclinación, aunque pueda incidir, no es determinante. La serie, en definitiva, aún cuando los Tigres salieron favoritos, promete que será reñida, tal y como ha resultado en estos primeros partidos. Se trata, sin dudas, de dos grandes equipos.Hay que esperar. PARA QUE LO APRENDAS O LO RECUERDES: El récord de partidos jugados en una temporada en la pelota dominicana, está en manos de Rufino Linares,Leones del Escogido, con un total de 68, quien lo estableció en la campaña correspondiente a 1983-1984. ¡Suena la campana! ¡Climmp!