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Desde hace más de 15 días, los alrededores de los hospitales del municipio de Mao, en Valverde, se encuentran bajo vigilancia de militares del Ejército de la República Dominicana, situación que se presume ha ocasionado miedo entre los haitianos indocumentados ante su posible deportación.
Se constaba la alta cantidad de inmigrantes haitianos que acudían a los centros de salud públicos en esta demarcación en búsqueda de asistencia médica, pero la situación ha conllevado a que exista una merma en la afluencia de pacientes haitianos durante los últimos días.
Así lo explicó Harold Espinal, presidente del Colegio Médico Dominicano (CMD) en esta provincia, quien mencionó que, aunque no cuenta con mayores detalles, se presume que se trata de un protocolo por parte de las autoridades. Un equipo de Listín Diario realizó un recorrido por varios de estos centros, específicamente el Hospital Dr. José Francisco Peña Gómez y el Hospital Regional Luis L. Bogaert, donde la vigilancia militar ha sido apostada en los alrededores de los centros de salud resguardando el movimiento en la zona.
NO PERMITEN FOTOGRAFÍAS
Al realizar fotografías a los hospitales, donde se evidenciaba la presencia de los miembros del Ejército, un equipo de periodistas fue abordado por personalidades del Servicio Nacional Salud (SNS), indicando que no estaban autorizados para tomar fotografías, y que las órdenes venían de una directiva superior.
Aunque no están justo en la entrada de los centros médicos, permanecen estratégicamente en la manzana que rodea la infraestructura de salud, pero esto no siempre fue así, los residentes indican que en un principio se instalaban en las puertas regulando y verificando la entrada de los pacientes.
MOTOCONCHISTAS
El bajo número de pacientes que ahora acuden a los centros de salud de la demarcación, ha traído como consecuencia que los motoconchistas estén “con el grito al cielo”, porque además de corroborar que los haitianos no acuden a atenderse por miedo a ser deportados, expresaron que sus ganancias se han reducido significativamente.
Uno de ellos, cuyo nombre quiso reservar, explicó que si antes lograban ganar más de RD$1,200 pesos al día, ahora con la baja concurrencia de personas, no su ingreso diario no llega a los RD$500. “Cuando venían 100 pacientes, 90 eran haitianas”, indicaron los motoconchistas ubicados frente a unos de los centros, al tiempo que dijeron que “cargando haitianos se ganaban la vida, pero ahora, ¿qué vamos a montar?”.
En 2017, el ministro de Defensa de ese entonces, Rubén Paulino Sem, reveló que los centros públicos y privados de la frontera estarían militarizados, supuestamente para detectar los cabecillas de los tours de parturientas que se organizan en Haití y venían a parir al país.
En momento, el ministro Sem manifestó que desplegaron personal de inteligencia de los cuerpos castrenses en esos centros para hacer los levantamientos de haitianas.