Exboxeador Cuero Duro no quiere morir sin ingresar antes al Salón de la Fama

José Alfredo Espinal

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Mientras muchos de sus oponentes  entrenaban y se alimentaban bien, él se la pasaba trabajando en fincas arroceras en su natal municipio de Esperanza, provincia Valverde.

Santiago.- Danilo Cabrera, nombre de pila de Cuero Duro, en la década de los 80, fue un electrizante boxeador. Inició el profesionalismo en 1983 y en su primera pelea se enfrentó al tamborileño Luis Ramos.

El nacido en el municipio Esperanza, en la provincia Valverde, además de los escenarios locales y nacionales,  se paseó por los cuadriláteros de diferentes partes del mundo.

Francia, Bélgica, Alemania, Italia, Estados Unidos, Venezuela, Cuba, México, entre otros países, fueron recorridos por el veterano boxeador dominicano.

Entre sus contrincantes se destacan el mexicano Julio César Chávez y el británico Barry MacGwigan.

Pensionado y a sus 62 años, el ex pugilista Cuero Duro solo desea una cosa: ser exaltado al Salón de la Fama del Deporte Dominicano.

Cuero Duro pidió al presidente Luis Abinader, al ministro de Deportes, a la clase deportiva en general, que no lo dejen morir sin llevarlo a la inmortalidad.

“Fui selección nacional, a nivel profesional tuve 84 peleas y perdí 9 y a en amateur de 108 peleas solo perdí 4. Solo quiero ir al Salón de la Fama, ahora en vida, no cuando muera”, afirmó Danilo Cabrera, (Cuero Duro), al ser entrevistado en el programa A Profundidad,  en la plataforma de YouTube Caribbean Digital TV.

Cuero Duro cuenta que en su época como boxeador no ganó tanto dinero como pasa en la actualidad, pero que lo poco que consiguió lo malgastó en las calles, con mujeres y amigos. Dice, sin embargo, que a pesar de todo, nunca se vio envuelto en escándalo de drogas ni otros casos negativos.

Con orgullo, afirma, que en su tiempo de boxeador solo él, Jack Veneno (fallecido) y Fernandito Villalona lograron llenar el antiguo  Palacio de los Deportes de Santiago (Hoy Gran Arena del Cibao).

Además de recibir una pensión que logró por sus 22 años de servicio en la guardia, Cuero Duro también ayuda su economía trabajando como taxista.