José A. Toribio
Caribbean Digital
SANTIAGO, RD.– El parque Duarte un lugar de libre esparcimiento para el público en general, que además conlleva un gran valor histórico para nuestra ciudad. Sin embargo, en los últimos tiempos se ha convertido en un centro comercial por la gran cantidad de vendedores ambulantes.
Este lugar de recreación que está situado en el mismo corazón de la ciudad, vertiginosamente ha ido perdiendo el respeto por su historia y sus visitantes de antaño ahora tienen que conformarse con evocar aquellos años donde desde su vetusta glorieta disfrutaban de las frecuentes retretas de la que era escenario.
En este escenario histórico se puede observar, lo que lo han transformado en un mercado, aquí se ofertan ropas, calzados, pinturas, artículos comestibles y hasta un pequeño negocio de venta de celulares y accesorios para esos aparatos ya opera allí.
Desde que se llega al Parque Duarte, los buhoneros informales ofrecen una diversificación en las ventas que van desde frutas, ropa, cremas hasta calzados.
Como si se tratara de un mercado y no de un espacio público que debe mantenerse libre para el uso de los peatones y personas que vienen a buscar recreación, los vendedores ambulantes, han hecho de este parque un puntos comerciales en espacio que hoy son un pandemonio.
Aquí se puede observar también vendedores de cocos, yun-yun, fracataneros, vendedores de Manzanas, relojeros, Skimal, carrito de Hot-dog, botellas de aguas son partes de los que se buscan la vida en el parque Duarte
Los propietarios de estos establecimientos llegan con sus mercancías, mesas, sillas y otros artículos alrededor de las 6:30 de la mañana y se marchan después de las 5:00 de la tarde.
Los pequeños comerciantes proceden de los diferentes barrios de la ciudad de Santiago, así como algunos lugares lejanos de esta localidad.
Se puede ver como los vendedores ambulantes se ha adueñado de dicho espacio para el espaciamientos del Santiagueros, yaqué no existe un lugar donde no este ocupado por un negocio informal.
“Este parque es un desastre, aquí no hay paz y tranquilidad que es lo que define una estructura como esta. Aquí hay muchas bulla, abunda el escándalo, donde quiera aparece un vendedor a ofrecerte algo que tu no quiere y para colmo quiere que se lo compre obligado, este parque es un total desastre» dijo Fidelio Guzmán quien tiene mas de 7 años acudiendo al parque Duarte.
Indicó que todo el parque se encuentra arrabalizando lo que impide el libre tránsito peatonal y que además no les da buena impresión a los turistas que vienen a visitar la ciudad.
En momentos en que la crisis económica encarece los productos de consumo masivo, ciudadanos ven estos puestos como una alternativa para ofertar mercancías a bajo precio.
También podemos ver que aquí se venden celulares, chip y protectores para celulares y tarjetas, hay dos paleteras, también vendedores de DVD, CD, lentes, café, te, pan entre otras mercancías que se puedan vender.
El parque se puede ver como se ha ido abandonado con el pasar del tiempo, necesita un toque de pintura e iluminación; no tiene grama y los árboles llevan años sin acondicionar.
“Hace tiempo que esto dejo de ser un parque de espaciamiento, esto se ha convertido en una plaza comercial. Aquí se vende de todo, es mas esto es la competencia a la centro de la ciudad, es increíble lo que se puede encontrar aquí» dijo Miguel Peralta quien visita el pulmón.
En el lugar histórico posee también vendedores de almohadas, así cigarrillos, zapatos, juguetes, cepillos y pastas dentales, control remoto y hasta se reparan celulares haciendo de este parque una plaza para el comercio.
Los famosos limpiabotas.
Uno de esos oficios informales es el de limpiabotas o lustrador de zapatos, del que subsisten numerosas personas, incluidos miles de niños, en los pueblos y ciudades de la República Dominicana.
“Limpiabotas marrón y negro, por cinco cheles se los pongo nuevos”, era una expresión muy escuchada en el parque Duarte, pero que el paso del tiempo y la devaluación de la moneda han convertido en una memorable leyenda urbana.
Según datos en el parque Duarte visitado por más de 40 limpiabotas por días, ya sea dominicanos y haitianos buscando el sustento para sus familias.
Pero en el parque Duarte se puede decir que habita el lustrador mas viejo del país llamado Ramón -Tuto- Pérez ha visto pasar los últimos 74 años de su larga existencia, lustrando calzados como un “caballo” incansable con esas dos manos que Dios le dio para ganarse la vida.
Su caja de limpiabotas, y su probada destreza, le han permitido a este emblemático personaje levantar su casa y criar a los cinco hijos que trajo al mundo.
“Este no es la sombra que era, aquí se podía recrear en paz y vivir como un Dios, pero se ha arrabalizado, los haitianos y personas que no son la ciudad creen que esto es un lugar donde pueden poner cualquier tipo de comercio, situación que ha convertido el parque mas importante de la ciudad una cueva de ladrones” dijo don Tuto
Con 94 años, once nietos y siete biznietos a cuestas, Tuto conserva aún la lucidez, energía y hasta el sentido del humor necesario para ejercer el oficio de limpiabotas, del que dice sentirse orgulloso.
Parque Duarte invadido por haitianos
Transeúnte denunciaron como una afrenta las deplorables la cantidad de nacionales haitianos abunda que lleva el nombre del Padre la Patria, patricio Juan Pablo Duarte en esta ciudad de Santiago.
Dijeron que mujeres de nacionalidad haitiana que se dedican a la prostitución, con su llegada a lugares públicos y calles, sin que las autoridades de Migración y la Fiscalía, actúen.
“Lo que ocurre aquí después de la 8 de las noches es una vagabundería, el parque Duarte parece unos moteles, aquí no hay respecto por los haitianos hacen y desasen, lo ensucian, defecan, rompen los arboles, lo están destruyendo a la vista de las autoridades y esta no hacen nada” dijo el señor Belarminio Cruz quien tiene mas de 13 años visitando el parque.
Explico que las haitianas a la hora de sostener relaciones sexuales se ganan con justificación el dinero que les pagan, mientras todo esto ocurre las autoridades competentes de la zona no toman ningún tipo de control sanitario.
Historia del Parque Duarte de Santiago de los Caballeros
Santiago carecía de un parque de recreo para los primeros años de 1880. Pero el 9 de marzo de 1884, Ulises Franco Bidó, invitó a un grupo de amigos para la fundación de la sociedad «Progresistas del Yaque», que dotaría a la ciudad de un parque para el esparcimiento.
Su construcción se remonta a los primeros años del siglo pasado, pero fue formalmente inaugurado el 26 de enero de 1913 en ocasión del primer centenario del nacimiento del patricio Juan Pablo Duarte.
Ocupando lo que fue la Plaza de Armas de Santiago, está bordeado por importantes edificaciones, entre ellas la Catedral Santiago Apóstol, la Gobernación Provincial, el Centro de Recreo y el Palacio Consistorial.
En su interior, el parque, que tiene grandes samanes y otras variedades de árboles, alberga su tradicional glorieta y el obelisco
que fue el primer Monumento a los Héroes de la Restauración, erigido en 1918 en plena ocupación militar norteamericana.
En 1917 se construyó en el Parque Duarte el primer Monumento a los Héroes y Mártires de la Restauración que se erigiera en la Republica Dominicana.
En el pasado, el lugar era el escenario de citas de enamorados, quienes los jueves y los domingos se juntaban para cantar y bailar con las tradicionales retretas interpretadas por la Banda Municipal de Música.
Los más famosos limpiabotas y las noticias más importantes eran el discurrir diario del lugar que también servía para las tertulias de viejos santiagueros que se reunían allí después de cenar.