La 64 edición de MBFWM empezó con una noticia que dejó a todo el mundo descolocado y es que el diseñado Ángel Fernández Ovejero, aka Ángel Schlesser, anunciaba su no presencia en el desfile de la firma que él mismo creó. La razón: los cambios en la línea de diseño de esta colección que habría traído la venta de la firma la primavera pasada. Inmediatamente saltó en redes sociales el hashtag #EstoSiTieneAngel, con multitud de celebrities, modelos y famosos varios que mostraban su apoyo al diseñador.
En esta edición hemos podido soñar despiertas y no solo gracias a las propuestas de los diseñadores sino también a la espectacularidad de las puestas en escena de los desfiles. Nos imaginamos en mitad de la sabana de Kenia, rodeadas de jirafas, con la propuesta de Jorge Vázquez y en un patio andaluz con balcones de forja y macetas de geranios, dentro del desfile de Leandro Cano. ¡Hasta estuvimos entre coches desguazados! Cortesía de Maria Ke Fisherman. Hubo patinadoras, un halcón, Ana Beatriz Barros… ¡Cómo para perdérselo!
Devota & Lomba y su colección blue and white llena de geometría y controlados volúmenes, Moisés Nieto y sus looks deportivos chic, Juanjo Oliva y su savoir faire creando vestidos de cuento de hadas, Ana Locking y su print de camuflaje, el metalizado de The 2nd Skin, el cambio de chip de Felipe Varela… hasta las propuestas que desfilan en el espacio Samsung Ego de la mano de los diseñadores más jóvenes, esos que pronto darán mucho de qué hablar. Hablando de jóvenes diseñadores, Abrahamsson se ha llevado el premio Samsung EGO Innovation Project, por un desfile en el que convivían las modelos de carne y hueso sobre la pasarela y sus hologramas. ¿Mola verdad?
Y todo esto es lo que vemos pero, ¿qué hay de ese trabajo que pasa desapercibido al ojo de quien acude a ver un desfile? Nos referimos al trabajo de peluqueros y maquilladores que, día tras día, hacen posible que el look del diseñador sea totalmente completo. Porque una bonita creación no sería lo mismo si la modelo fuera mal peinada, sin maquillar o con un look beauty que no encajara con la propuesta del creador. Y, una edición más, la belleza de las modelos ha estado en manos de L’Oréal Paris, que también ha querido acercarse al público con su stand en MBFWM. Durante estos seis días de desfiles, todas las chicas que han querido han sido maquilladas por expertos con productos de la gama Accord Parfait, con la máscara de pestañas Volume Million Lashes y los labiales Gold Obssesion.
Por cierto, el Premio L’Oréal de esta edición se lo ha llevado el diseñador Juan Duyos y la modelo Marta Ortiz. ¡Enhorabuena!