Charlo vs Castaño, pelea explosiva…

Domingo Hernández

El pasado sábado, en el Dignity Health Sport Park, en  Carson, California, se celebrò un combate que en cierto modo pasò desapercibido en el país, no asì para  Estados Unidos y Argentina.

Se trata del que enfrentò al norteamericano Jermell Charlo y el argentino Brian Castaños. Fue una revancha de aquel espectacular combate que ambos habían sostenido en julio del año pasado y que terminò en un empate muy discutido.

La contienda fue por la unificación del título mediano junior -154 libras-. Charlo exponía  las tres diademas que hasta ese momento poseìa, la del Consejo Mundial de Boxeo –CMB-, Asociaciòn Mundial de Boxeo –AMB- y Federaciòn Internacional de Boxeo –FIB-, mientras que Castaños hacìa lo propio con la de la Organizaciòn Mundial de Boxeo –OMB-.

Tal y como ocurrió en el primer duelo, esta vez Charlo y Castaños ofrecieron una tremenda pelea, explosiva en su mayor parte, e incluso, en sentido general, màs intensa que ese primer enfrentamiento, básicamente en su primera mitad.

En efecto, en los seis primeros asaltos, el choque fue intenso y violento en magnitudes extraordinarias.

Ambos boxeadores se golpearon con todo, con lo mejor que exponía cada uno de ellos. Charlo trataba de boxear y conectar de manera sòlida e imponer su ritmo de combate a media y larga distancia, pero el argentino, un fajador granítico, no le daba tregua, y lo perseguía por todo el cuadrilàtero, cortándole el paso, y lanzando golpes potentes con ambas manos, en aras de obligarlo a la pelea en corto que, dicho sea de paso, era lo que le convenía al sudamericano, en razón de tener menor estatura y alcance que el estadounidense.

Hasta ese momento el duelo lucìa muy equilibrado, quizás con una leve ventaja para Castaño, quien había impuesto su patrón de combate de presión contìnua sobre su rival.

Sin embargo, fue a partir del séptimo asalto cuando Charlo, hizo ajustes, comenzó a construir su victoria en base a mejor boxeo, inteligencia, velocidad, precisión y potencia, en cuyo proceso impuso la pelea a media y larga distancia, con jab, rectos, ganchos y uppercutts sòlidos a la anatomía de Castaños. El argentino,  quien siempre se mostrò valiente, trataba de responder, pero descendió su ritmo y volumen de golpes y era inefectivo, en sentido general.

En cambio, Charlo se crecía e imponía cada vez con mayor eficiencia su patrón de pelea. Ya en lo adelante, el dominio fue claro para Charlo, pese a que Castaños se mostraba incisivo y competitivo, pero sus golpes resultaban, en su mayoría, inefectivos.

El final llegó en el dècimo asalto, a los 2:33 segundos, cuando Charlo en corto, conectò un gancho de izquierdo que depositò en la lona a Castaños en muy malas condiciones, quien se levantò totalmente groggy. Tras reanudarse las acciones, de inmediato Charlo arremetió sobre èl, primero con una izquierda, larga y luego con un gancho de izquierda al costado derecho que envió de nuevo a la lona a Castaño para concluir la contienda.

Charlo se convertía asì en campèon absoluto –a sus tres títulos unió también el de la OMB, para poseer los cuatro oficiales- y de paso confirmaba su calidad estelar y su condición de ser el mejor del mundo en las 154 libras y, se supone que ahora, uno de los mejores campeones libra por libra del momento.

Fue el nocaut número 19 para Charlo y su victoria 35, con apenas una derrota y un empate.Castaños de su lado, sufrió su primer revés, con 17 triunfos, 12 de ellos por la vìa rápida y un empate.

Fue, sin discusión, un gran pleito, en donde probablemente el capìtulo  número cinco sea candidato a “Round del Año”. Castaños hizo un gran esfuerzo y lo dio todo encima del tinglado, fue un digno rival, pero Charlo resultò ser superior en recursos, sobre todo, en el aspecto técnico, velocidad y precisión en su golpeo, además de que supo aprovechar sus ventajas en estatura y alcance.

Es posible que Charlo decida subir a la división inmediata superior, los medianos (160 libras) y deje vacante sus cuatro campeonatos, en interés de ganar coronas en dos pesos distintos. Ello podría abrirle “una brecha” a Castaños para que vuelva a ser campeón. Habrìa que ver, empero, què decide Charlo respecto a su futuro inmediato, el cual luce brillante.ESQUINITAS-. A propósito, el dominicano Joan Guzmàn, gloria del boxeo dominicano y quien ahora se dedica a entrenar boxeadores, estuvo en la esquina de Jermell Charlo, como parte del equipo de trabajo de la estrella estadounidense. PARA QUE LO APRENDAS O LO RECUERDES:Por cierto, ahora que tratamos este casillero de las 154 libras, es oportuno decir que el `mas consistente campeón que posee este peso en toda su historia, lo fue el italiano Gianfranco Rosi, quien hizo 11 defensas exitosas del trono. ¡Suena la campana! ¡Climmp!