Rafael Baldayac
Especial/Caribbean Digital
SANTIAGO, RD.- Un científico norteamericano llamado Alexander Loyd, con doctorado en psicología y medicina natural, descubrió y desarrolló unos conceptos y mecanismos llamados por el, “El Código de Curación”, considerado uno de los sistemas de sanación más simples y efectivos que existen hoy día en armonía con los principios bíblicos.

Sera esto una nueva técnica Teoterápica? El afirma que los Códigos Curativos solamente están dirigidos hacia los “asuntos del corazón” de los que Salomón escribió al respecto hace más de 3,000 años, cuando expresó en Proverbios 4:23, “Guarda tu corazón por encima de todo lo demás, puesto que de él emanan todos los asuntos de la vida”.
Reitera que todos los asuntos de la vida provienen del corazón. Esto es el porqué los resultados y testimonios de las personas reportan la curación de casi cualquier asunto de salud que te puedas imaginar, luego de usar El Código Curativo.
El doctor Loyd escritor del libro best-seller “El código de Curación”, con más de 170 mil ejemplares vendidos, aparentemente ha descubierto una nueva fórmula de Teoterapia, el tratamiento de Dios para el hombre en sus tres dimensiones: Espíritu, Alma y Cuerpo.
Tanto así que recientemente dio a conocer su última obra «Física Espiritual Avanzada» (Advanced Spiritual Physics), una nueva teoría que tiene que ver con el mejoramiento interior para mejorar el entorno y llegar a la curación del cuerpo físico.
Esta teoría junto con los códigos de sanación, ayudan a las personas a desechar erróneas actitudes y creencias y sanear aquellos asuntos del corazón que le causan tensión, fracaso e, incluso, enfermedades físicas.
Miles de personas en todo el mundo usan este eficaz método para eliminar el estrés desde el 2001 cuando lo dio a conocer.
Este procedimiento, es tan efectivo, explica en su libro, que muchos profesionales de la medicina después de haber probado este método con ellos mismos y sus pacientes, afirman que estos códigos colocan al cuerpo en un amplio estado de curación en el que el propio cuerpo se prepara para curarse a sí mismo.
Ha sido demostrado por las universidades de Harvard, y Stanford, así como por la Clínica Mayo. Todos coinciden en que el estrés es la única fuente causante de hasta el 95% de todos los síntomas y enfermedades conocidas.
Y agrega que desde que el doctor Loyd tuvo sus primeras experiencias usando el código curativo universal en el tratamiento de desórdenes emocionales, ha desarrollado nuevas formas y combinaciones aptas para resolver bloqueos que están en la raíz de problemas de la salud física.
El Dr. Alexander Loyd es un invitado habitual de programas de los canales de televisión norteamericana como NBC, ABC, CBS, Fox y los programas de PBS News como experto en terapias alternativas para el eliminar el estrés
¿Quién puede usar el código curativo y como se usa? Aseguran que es fácil y rápido aprender a usarlo. Cualquier persona, incluso un niño sin tener conocimiento alguno de medicina, puede aprender a utilizar los códigos en unos minutos.
Esta técnica se aconseja realizar en seis minutos y consta de colocar la punta de los dedos de una determinada manera apuntando en una secuencia específica a diferentes puntos del cuerpo, las sienes, la mandíbula, el puente de la nariz, etc…
El poder de curación a través de las manos, no es un misterio. Ya en china desde hace miles de años, en acupuntura o digitopuntura, se usan lo que ellos llaman los puntos pozo. Unos puntos que están entre las uñas y las yemas de los dedos, que se utilizan para infinidad de terapias.
“Los Códigos Curativos son el más grande descubrimiento de curación de la historia. debido a que pone a la sanación bajo tu control. Una vez que pruebes este método tu vida comenzará a cambiar instantáneamente” ¡Pruébalo y ve que sucede!” testimonia Bill Boshears, científico y anfitrión del programa “SciZone”.
Sin embargo las promesas de Dios para los enfermos están reveladas en Jeremías 33:6 “He aquí que yo les traeré sanidad y medicina; y los curaré, y les revelaré abundancia de paz y de verdad”. Él nos trae sanidad integral, no solo física sino también espiritual y mental al prometernos abundancia de paz y verdad.