El 30 de marzo en Washington se inaugura la Cumbre de Seguridad Nuclear, que este año se celebrará sin la participación de Rusia, informa el periódico ‘Izvestia’.
De acuerdo con las declaraciones del portavoz del presidente ruso, Dmitri Peskov, Vladímir Putin no planea participar en la reunión. En el Kremlin también destacan que la agenda política de estas reuniones a nivel presidencial está agotada.
Según el Ministerio de Asuntos Exteriores ruso, citado por ‘Izvestia’, en 2016 los organizadores han cambiado radicalmente la concepción del evento, al proponer la elaboración de una especie de «recomendaciones» para la Agencia Internacional de Energía Atómica, la Iniciativa Global contra el Terrorismo Nuclear, la ONU y la Interpol.
Según el Ministerio, estas recomendaciones podrán imponer a las organizaciones internacionales el punto de vista de un grupo limitado de Estados por encima de los mecanismos internos de toma de decisiones políticas.
Los temas clave de la cumbre
El evento contará con representantes de más de 50 países. Los temas principales que se abordarán durante las reuniones y encuentros bilaterales serán el programa nuclear de Corea del Norte y la lucha contra el Estado Islámico.
Se discutirán también las amenazas para la seguridad nuclear y los materiales nucleares vulnerables, la lucha contra la proliferación nuclear y los intentos de prevención del terrorismo nuclear y se identificarán las medidas para reducir el uso de uranio altamente enriquecido.
Los temas ignorados
Los principales países occidentales utilizan la cumbre para reducir el papel del OIEA y desviar el debate sobre cuestiones más importantes como la no proliferación nuclear, opina el director del grupo de asesoramiento del Instituto Ruso de Estudios Estratégicos y profesor de la Academia Rusa de Ciencias Militares, Vladímir Kozin.
Entre los temas que casi no se discuten se encuentra el arsenal nuclear de Israel, que habría podido seguir el ejemplo de Irán, pero no lo hizo. Además, no se discute el hecho de que EE.UU. desplace sus armas nucleares tácticas en el territorio de Turquía.
Las medidas de prevención para Corea del Norte y el EI
«Probablemente, los participantes elaborarán algunas iniciativas específicas destinadas a presionar a Corea del Norte para obligarla a abandonar su programa nuclear. Sin embargo, como no hay garantías internacionales de seguridad de este país, no podemos esperar que Pionyang abandone sus pruebas y el desarrollo de la tecnología nuclear», opina el doctor en Ciencias Militares, Konstantín Sivkov.
En relación con el Estado Islámico, Sivkov destaca que el riesgo de que los terroristas consigan armas nucleares es real.
Yukiya Amano, director general del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA), también ha advertido que el mundo debe extremar las medidas para prevenir el «terrorismo nuclear»
Según Amano «no es imposible» que los extremistas puedan llegar a fabricar un dispositivo «primitivo» si se apoderan de material nuclear. «Es ahora una tecnología antigua y hoy en día los terroristas tienen los medios, el conocimiento y la información», advierte.
Mientras tanto, el Gobierno de Estados Unidos por el momento no dispone de información de que el Estado islámico esté tratando de conseguir armas nucleares.