Negro Veras critica la indiferencia ante la descomposición social que impera en el país

JOSÉ ALFREDO ESPINAL

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SANTIAGO.- El reputado jurista y activista social, Ramón Antonio-Negro- Veras,  lamenta que en la República Dominicana existan personas indiferentes al estado de descomposición que impera en el país, expresado en desigualdad, prostitución, corrupción, narcotráfico y criminalidad, mientras que a otras les repugnan las indecencias y las inmundicias que “nos arropan como sociedad”.

“La podredumbre que señorea aquí es estimulada y aceptada por grupos sociales cuya moral de cafres se adapta perfectamente a su mentalidad y procuran que perdure el fango que es hoy nuestro país”, afirmó.

Dijo que una sociedad dominada por el individualismo, genera personas de comportamiento egoísta, de falsía, mezquindad y codicia y, por tanto, sin formación ni base ideológica para compartir sinceramente con otras formadas en la solidaridad, la generosidad y el altruismo.

“Partiendo de las ideas anteriores, podemos advertir en el seno de la sociedad dominicana hay hombres y mujeres de comportamientos diferentes; personas con forma de conducirse que se distinguen unas de otras”, señaló.

Negro Veras manifestó que la desigualdad en las clases sociales trae consigo la diversidad de conductas; la separación en la actuación de entes que conviven en el mismo medio.

El abogado sostuvo que la diferencia clasista se manifiesta en todo el comportamiento humano, argumentando que aquí hay mujeres y hombres sensibles e insensibles, buenos y malos, honrados y ladrones, “en fin, personas que con su proceder apestan y otras que con sus actuaciones perfuman”.

“No resulta difícil adivinar la profundidad del descalabro moral, la estropeada forma de comportamiento cívico de nuestros ciudadanos, la quiebra en las aspiraciones para construir un mejor país”, apuntó.

Consideró que hasta en las relaciones personales más sensibles se evidencia que en este  medio está presente una pendiente, una declinación total en el decente proceder, donde a su juicio, lo incorrecto se ha convertido en norma de vida, lo irregular predomina sobre lo puro y lo perfecto ha cedido ante lo anormal.

 “En vínculos que descansan en la lealtad, como la amistad, a diario recibimos decepciones de parte de quienes creíamos fieles; en un santiamén se quitan el velo que cubría su infidelidad, su inconstancia”, expresó.

“Con el transcurrir de los años, por la acumulación de vivencias, el ser humano asimila toda una serie de hechos que llegan a motivar su forma de ser. Por ejemplo: Me he dado cuenta que últimamente, para escribir con respecto a un determinado tema subyace en el fondo de mi alma alguna causa que lo genera”.

Negro Veras dijo que toda una serie de características están unidas a la persona, dependiendo la organización social que ha determinado su conducta. “La individualidad y el carácter de cada quien lo lleva a manifestarse en una u otra forma, lo que, al final, permite ubicar su idiosincrasia”.