Los Bravos lo hicieron otra vez: Dodgers quedan tendidos en el terreno

Caribbean Digital

Los Bravos de Atlanta dejaron tendidos en el césped de su estadio Truist Park por segundo día consecutivo a los Dodgers de los Ángeles, esta vez 5×4, para colocarse más cerca del banderín de la Liga Nacional.

Un cañonazo impulsador del boricua Eddie Rosario (de 5-4 en el choque) frente a un envío del taponero Keylen Jansen, le puso fin al duelo de esta jornada en medio de una euforia colectiva en las tribunas, para que su tropa mantenga su invicta en esta serie y pueda viajar más tranquila a casa de sus peligrosos rivales.

Los visitantes comenzaron el pleito muy impetuosos marcándoles un par de carreras al abridor local Ian Anderson, un lanzador que no había permitido anotaciones en cuatro de sus cinco aperturas en postemporadas.

El primer hombre en la alienación, Mookie Betts, le conectó sencillo a la pradera izquierda y segundos después Corey Seager le “enganchó” una curva que rompió en zona y puso a viajar la pelota más allá de los límites del terreno.

El abridor de los Dodgers Max Schezer retiró sin problemas los tres primeros episodios, pero cerrando el cuarto boleó a Austin Riley, y Joc Pederson-también sobe un lanzamiento en curva-sonó un monstruoso batazo que cayó a 454 pies del plato para igualar las acciones.

En el “Lucky seven” el cuarto apagafuegos de los anfitriones, Tyler Matzek, regaló un par de bases por bolas (una intencional) antes de irse a la cueva, y Luke Jackson, después de propinar un pelotazo que congestionó los ángulos, soportó un tubey de Chris Taylor que trajo a dos compañeros a casa para que sus azules del oeste volvieran a tomar ventaja de dos carreras, sin saber que sería la última acción positiva de la noche para ellos.

Un capítulo más tarde volvió el abrazo en la pizarra cuando los Bravos cayeron sobre los envíos del estelar mexicano Julio Urias, por primera vez en funciones de relevista en el año. Tres indiscutibles, entre ellos un sencillo de Ozzie Albies y un doblete de Riley, estropearon la estrategia del manager Dave Roberts.

Will Smith volvió a llevarse la victoria al lanzar la última entrada sin tolerar libertades con dos ponches incluidos, y la derrota cayó en las espaldas de Brusdal Graterol, al ir a sus récords la carrera que decidió el partido.

El próximo martes será el tercer duelo de esta batalla de campeonato en los predios del Dodger Stadium.