Domingo Hernández
Este 2024 prácticamente agoniza y es hora de ir pasando recuento a parte de los acontecimientos más importantes en el ámbito del boxeo en el plano internacional.
Y ese sentido, no cabe dudas de que uno de los combates de mayor relevancia fue el que protagonizaron el youtuber convertido en boxeador, Jake Paul y el excampeón del mundo de los pesados Mike Tyson.
La pelea fue celebrada el 15 de noviembre del presente año en el ET&T Stadium de Arlington, Texas, y estuvo pactada a ocho asaltos de dos minutos cada uno.
Paúl de 27 años de edad y Tyson de 58 materializaban así un enfrentamiento inusual que enfrentaba a dos generaciones.
La contienda concitó la atención del mundo del boxeo y se constituyó en la más vista de la historia y también la más exitosa en términos económicos,pues se recaudaron cientos de millones de dólares.
La misma fue transmitida por la plataforma de Netflix y se calcula que la vieron 108 millones de personas en todo el mundo y en sentido general.
De esa extraordinaria cantidad, se estima que 65 millones la presenciaron en transmisiones simultáneas, 38 de ellos sólo en los Estados Unidos(72,300 la vieron en el ET&T Stadium).
Paul y Tyson se repartieron 60 millones de dólares, el primero, quien fue que organizó y montó la cartelera mediante su empresa MVP Promotions, ganó 40 millones de dólares y el segundo 20.
Un fiasco…
El enfrentamiento, no obstante, en la práctica y ya hablando en términos boxísticos, fue el más decepcionante, no sólo de todo el año, sino también de los últimos tiempos, podría decirse sin temor a equívoco.
En efecto, Paul y Tyson ofrecieron un espectáculo deprimente en el que ninguno de los dos pareció dar lo mejor de si, aún cuando el joven youtuber fue el más dominante y controló las acciones, relativamente a su manera a partir del tercer asalto. Incluso, dio la impresión de que Paul no quiso noquear a Tyson y en cierto modo lo consideró y lo respetó, en razón de la gran leyenda que éste representa para el boxeo y lo mucho que hizo dentro de este deporte.
La pelea, ganada por Paul por decisión unánime, provocó todo tipo de comentarios, negativos casi todos, pues en realidad resultó un verdadero fiasco.Sin embargo, hay que reconocer que, en el aspecto mercantil, como negocio, fue todo un éxito y podría decirse que marcó el año en ese aspecto, pues ninguna otra lo superó. PARA QUE LO APRENDAS O LO RECUERDES:A propósito de Mike Tyson, es oportuno decir que éste se convirtió en el campeón mundial pesado más joven de la historia cuando, el 22 de noviembre de 1986, noqueó en dos asaltos al jamaiquino y entonces monarca, Trevor Berbick, para ganar el trono. Para entonces, Tyson apenas contaba con 20 años de edad. ¡Suena la campana! ¡Climmp!