Caribbean Digital
Fuente: La Información
SANTIAGO, RD./ Nuevamente se monta en las alas del Espíritu Santo la Concentración de la Unidad a celebrarse por todo lo alto en la ciudad de San Francisco de Macorís el próximo 6 de abril, 2012.
Cada año este jubileo se realiza con la finalidad de bendecir a un pueblo especial que fué lavado con la sangre preciosa de Jesucristo, La Iglesia.
El Señor dijo: «Si se humillare mi pueblo, sobre el cual mi nombre es invocado, y oraren, y buscaren mi rostro, y se convirtieren de sus malos caminos; entonces yo oiré desde los cielos, y perdonaré sus pecados, y sanaré su tierra.» 2 Crónicas 7:14.
Es un evento de grandes proporciones espirituales que está en camino para «anunciar las virtudes de aquel que nos llamó de las tinieblas a su Luz Admirable».
El acontecimiento evangelístico a celebrarse el día 6 de Abril, Viernes Santo, en el Estadio Julián Javier de San Francisco de Macorís a las 2:30 de la tarde, ha despertado un gran interés en las diferentes Iglesias y Ministerios de San francisco de Macorís y la Región Cibaeña, pero además se manejan informes de que en todo el País se están realizando aprestos de parte de los diferentes pastores y líderes para estar presente en la jornada que lleva como título «La Concentración de la Unidad».
Saludamos y felicitamos al pastor Brunildo Ant. Bueno, y al equipo de siervos y siervas que el Señor ha provisto para esta labor misionera que aportará a la edificación y crecimiento de la grey del Señor que nos ha sido confiada, y a ensanchar las estacas de las habitaciones del Reino de Dios y su justicia.
La convocatoria será un momento único para orar por los enfermos, interceder por las familias, para abrir la puerta del perdon y el ósculo santo y de la paz, por el cese de la violencia intrafamiliar y general en la sociedad dominicana, para dar gracias al Señor por todas las cosas, y pedirle al Todopoderoso que con cuerdas de amor encamine las vidas a los pies de Jesús, para romper cadenas de maldiciones generacionales, y ser un puente para unir a la tripulación de Jesús, en fin, esta confraternidad de su pueblo se une para orar e interceder ante Dios por la familia, la patria, nuestros gobernantes, y por las naciones del mundo.