JOSÉ ALFREDO ESPINAL
SANTIAGO,RD.- Para muchos perremeístas el cambio aún no ha llegado. No es porque el Gobierno del presidente Luis Abinader lo esté haciendo mal, sino porque la aspiración principal de cada dirigente y militante del partido que hoy dirige los destinos del país tenía la esperanza de ingresar a una institución pública a trabajar.
La gente del partido gobernante no quiere botellas. Simplemente, desea un empleíto para ganarse el sustento de su familia. Después de 16 años en la oposición lo menos que pudieran aspirar los perremeístas es lograr la oportunidad de ir al gobierno.
Las quejas no se hacen esperar. Y aunque se cree que es una campaña de la oposición cuando se dice por doquier que como van las cosas el PRM no pasará del 2024 en el poder, es todo lo contrario; es la voz populi de los perremeístas desesperados por un empleo.
A seis meses de Luis Abinader estar al frente del gobierno muchos creen que quienes dirigen el país todavía son los peledeístas.
La muestra más clara se alcanza a ver en las actividades del primer mandatario de la nación. La seguridad y el equipo de protocolo hacen confundir a cualquiera. Si no se alcanzara a ver al mandatario y la vicemandataria, se pensaría que en algún momento determinado quien pudiera aparecer en el escenario es Danilo Medina.
A muchos no les gusta la comparación, pero el PRM aún luce en la oposición. No es porque no controlen el gobierno, sino porque muchos que contribuyeron al triunfo llevan meses mirando a los peledeístas pasar desde el mismo lugar que lo han estado haciendo desde hace 16 años.