Caribbean Digital
Suelos levantados, lámparas derribadas, bancos de concreto despegados, árboles caídos, acueductos y plantas de energía fuera de servicio y toneladas de basura arrastradas hacia la orilla, son algunas de las consecuencias que ocasionó el paso del huracán Beryl por la cercanía de la costa sur dominicana, con efecto en los litorales.
El oleaje intenso, que fue protagonista el pasado martes a medida que fue subiendo la tarde, cuando Beryl fue estrechando su recorrido por el país, provocó la actuación ayer miércoles de cientos de hombres, distribuidos a lo largo y ancho de la nación, desde distintas instituciones gubernamentales y afectados independientes, para aminorar los golpes estructurales.
Desde la autopista 30 de mayo, que había sido cerrada hasta la avenida Abraham Lincoln ante la previsión del Centro de Operaciones de Emergencia (COE) de la ciudadanía no deberían acercarse al mar y la llamativa fuerza de las olas, pasando por la playa Montesinos, el Malecón de Santo Domingo Este, Boca Chica, playa Guayacanes y el Malecón de San Pedro de Macorís, el escenario fue básicamente el mismo.
ACUEDUCTOS
El Centro de Operaciones de Emergencias emitió el primer boletín con los daños preliminares causados por el huracán Beryl en el país, donde al menos 89 personas están en cinco albergues situados en las provincias de Barahona y Pedernales.
Detalla que 57 acueductos se encuentran fuera de servicio, afectando a 487,020 usuarios, en varias provincias del país, debido a la alta turbidez del agua.