Domingo Hernández
Las series divisionales de las Grandes Ligas apenas inician.
Hay mucha expectación en esta etapa del bèisbol grande,sobre todo en aquellas organizaciones que tienen en sus nòminas una significativa presencia de jugadores dominicanos y en las que tradicionalmente han tenido gran arraigo y simpatía en la fanaticada domèstica, como son los casos de los Dodgers de Los Angeles y los Yankees de Nueva York, por sólo citar dos ejemplos.
Sin embargo, cuando el bèisbol invernal dominicano está “al doblar la esquina”, es lògico suponer que el interés del fanàtico podrìa decirse que comienza a dividirse.
En efecto, no hay dudas de que este período casi culminante de las Mayores suele central la atención de los dominicanos, porque es aquí hasta donde ha llegado “lo mejor de lo mejor” de toda la temporada de este histórico 2022, en lo que concierne a los conjuntos que lograron pasar a los playoffs y superar su primera ronda.
Ahora bien, resulta indiscutible de que no hay nada màs importante para los aficionados quisqueyanos, en lo que tiene que ver con deporte, que la pelota invernal y desde ya “esa fiebre” por el venidero torneo que inicia este sábado, ha comenzado a “arroparlos”.
Esto es asì, por el inicio de los entrenamientos de los distintos equipos y los juegos pretemporada que se han estado celebrando, parte de los cuales han sido vistos por buena cantidad de público en los distintos escenarios, tal y como sucedió el pasado domingo en el Estadio Cibao, en el partido entre Tigres del Licey y Aguilas Cibaeñas, a beneficio del Club Rotario.
A propòsito, los partidos pre-temporada o de “calentamiento”, un ingrediente que antes no se ponìa en práctica, han incidido para que los parciales de las diferentes franquicias, se vayan identificando y motivando màs rápidamente con el comienzo del certamen beisbolero. Es decir, estas actividades preliminares previo a la inauguración del torneo, no pasan desapercibidas para los dominicanos, quienes llevan el bèisbol en la sangre y cuya disciplina es parte relativamente intrínseca de su cultura. Por algo es nuestro deporte rey.PARA QUE LO APRENDAS O LO RECUERDES: Charles Radbourn logró 59 victorias en una sola temporada,marca que muchos historiadores estiman será “eterna” en el bèisbol organizado. ¡Suena la campana! ¡Climmp!