Comando Sur de Estados Unidos condena conducta de personal militares asignado a VI Cumbre

Por Rose Mary Santana

 Especial/Caribbean Digital

Miami, Fl.- La conducta de cinco militares adscritos al Comando Sur de los Estados Unidos, asignados como apoyo al Servicio Secreto en la VI Cumbre de las Américas que se efectuó en Colombia, fue condenada por el alto organismo, ya que “estos militares violaron el toque de queda establecido por el Oficial Mayor de Defensa de los Estados Unidos en Colombia”. El hecho se encuentra en investigación por el Pentágono.

 

El general Douglas Fraser, Jefe del Comando Sur.

El general Douglas Fraser, Jefe del Comando Sur, mediante un documento enviado a quien suscribe, dijo que “está decepcionado por el incidente y que este comportamiento no está de acuerdo con las normas profesionales que se esperan de los miembros de las fuerzas armadas de los Estados Unidos”.

 

Fraser agregó “que después de una exhaustiva investigación, el castigo, en este caso, se llevará a cabo de conformidad con las políticas establecidas y el vigente Código Uniforme de Justicia Militar”.

 

El vocero del Pentágono George Litte, informó que “son más de cinco los militares que se encuentran siendo investigados por el hecho”.

 

Los militares pertenecientes a Fuerza de Tarea Conjunta y cuyos nombres no han sido revelados, podrían haber estado involucrados en conductas inapropiadas con prostitutas en Colombia. Se alega que “habrían ocurrido en el mismo hotel donde se encontraban alojados los miembros del Servicio Secreto de los Estados Unidos”.

 

Cables de agencias internacionales indican que “algunos miembros del Servicio Secreto asignados a la seguridad del Presidente Barack Obama, durante su participación en la Cumbre de las Américas “socializaron” con algunas mujeres dedicadas a trabajo sexual en la zona.

 

El Comando Sur informó al respecto que “este personal aún se encuentra en Colombia, pero confinado a cuartos y órdenes de no tener contacto con otras personas. Ellos volverán a los Estados Unidos con el resto de la contingencia de apoyo, cuando concluya la misión”.

 

El hecho que ha consternado al Comando Sur,  sus altas autoridades y la sociedad estadounidense, se encuentra aún en fase investigativa por sus máximas instancias militares, quienes de comprobar la veracidad de los hechos que se les imputa “darán una respuesta ejemplarizadora”, según dijeron.