Carlos Peña afirma PLD pone barba en remojo al definir como “golpe de estado” lo ocurrido con Evo Morales

Servicios/Caribbean Digital

Carlos Peña afirmó que la definición dada por el gobernante Partido de la Liberación Dominicana, PLD, a lo ocurrido en Bolivia con el expresidente Evo Morales, es totalmente falsa, pues no se trató de un “golpe de estado” como dijera la dirección del partido morado, sino más bien de la renuncia de un mandatario que acorralado por un pueblo indignado ante un fraude electoral comprobado por organismo locales e internacionales, le exigió su salida inmediata del poder.

El PLD ya está poniendo su barba en remojo ante lo que pudiera suceder si pretenden permanecer en el poder por encima de la voluntad popular y es por eso que prefieren definir lo ocurrido en Bolivia con el expresidente Evo Morales como un golpe de estado y no como la reacción de un soberano pueblo ante un mandatario que pretendía continuar en el poder sobre la base de un fraude electoral”, señaló Carlos Peña.

Manifestó el aspirante a la presidencia de la República Dominicana que el pueblo boliviano le ha dado una gran lección de democracia a toda Latinoamérica, recordándonos que el poder reposa en los ciudadanos y que los procesos electorales deben estar revestidos de total transparencia y garantías suficientes de que la voluntad popular será respetada sin importar los sectores que salgan afectados.

Ninguna nación está obligada a aceptar resultados electorales que no resistan auditorías y mucho menos que no representen la soberana decisión de sus ciudadanos. Ante violaciones como esas, no hay otro camino que el recorrido por el valiente pueblo boliviano, a quienes felicitamos y deseamos lo mejor en esta nueva etapa de su historia contemporánea”, manifestó Peña.

Carlos Peña también llamó la atención de los órganos llamados a garantizar la transparencia en el venidero proceso electoral y le solicitó mirarse en el espejo de los actores públicos que en Bolivia propiciaron el fraude con la utilización del voto electrónico, indicando que República Dominicana es parte de una región que está despertando y se muestra dispuesta a hacer valer sus derechos fundamentales por la vía que sea.