Johanna Benoit
A las ocho de la noche estaba lista la sala digital de la plataforma social Zoom, líder en comunicaciones para videoconferencia, que permitió conectar a más de cien participantes para conversar con la mujer merenguera, dueña de una brillante carrera artística, la reina del merengue, Milly Quezada.
Una cita puntual con La Asociación de Cronistas de Arte filial Santiago que dirige la buena amiga periodista Grisbel Medina.
Durante el conversatorio notamos a una mujer empoderada, humilde y preparada, haciendo que cada integrante se sintiera en confianza y dialogara sin poses.
La merenguera mostró su calidez humana, habló del respeto por el oficio, el amor por el arte, la música y el merengue.
Desde su niñez desarrolló la imaginación, pasión por la música y el canto.
Puntualizó que todos los artistas tienen un vínculo con la manifestación de arte que asuman, la humanidad necesita consumir la música, la música, el arte no tienen fronteras, nos ayuda a enfrentar la vida, pues las redes sociales permiten llegar a más, y sobre todo poner nuestro talento en plataformas sociales.
La reina del merengue sostuvo que este momento de pandemia se le acalló la voz, “estamos estrangulados en el sentido de no poder compartir con nuestro público, la pandemia nos ha mantenido alejados”.
“El merengue es mi mayor medicina, ahora en pandemia he aprendido a descubrirme más, a no tener temor, andar con precaución y en el aspecto profesional, indagar en mi interior, aprovechar el tiempo”.
Milly citó que hemos sido muy limitados en cuanto a poder trascender. He buscado mucho de la música. El merengue ha evolucionado, sigue reinventándose como el primer día. Debemos defenderlo como Patrimonio cultural de la humanidad, dijo la artista dominicana.
Una artista que siempre trata de reinventarse, quien ha cultivado ese respeto por el oficio, y que manifiesta su agradecimiento al público, trabaja con amor, dedicación, su norte ha sido cantarle al amor y al desamor.
Milly, respalda que a través del turismo musical el gobierno promocione la bachata y el merengue, ambos son Patrimonio Cultural de la Humanidad, declarado por la UNESCO, ya que son parte de nuestra identidad cultura.
Felicitó a La Asociación de Cronistas de Arte por atender el desafío de trabajar por la clase artística para la celebración de los premios Soberano que se realizarán en junio de este año 2021. Donde se reconoce el trabajo tesonero,
el único premio para los artistas del país. Desde los renglones de la música, arte popular, arte clásico y comunicaciones de la República Dominicana.
Invitó a la juventud dominicana que se encamina en el arte, a registrar sus canciones en diferentes plataformas, como manera de crecer y generar sostenibilidad.
Al final agradeció al gremio de Acroarte por la convocatoria exitosa a través de la plataforma Zoom en este tiempo de pandemia.
Hasta otra entrega
Que Dios les bendiga!