una estupenda serie de acción al más puro estilo del Castigador

Nadie contaba, cuando se anunció el megaplan «Defensores» de Marvel y Netflix, que habría sitio para spin-offs «improvisados». Pero llegó la segunda temporada de ‘Daredevil’, con la llegada de El Castigador, y su éxito fue tan arrollador y su presencia tan abrumadora que no pudieron decir que no a la idea de darle una serie propia. Así, el próximo viernes la plataforma estrena ‘The Punisher’, donde volvemos a ver a Jon Bernthal enfundado de negro en su camino de destrucción.

He de reconocer que tenía muchas dudas con ‘The Punisher’. Dudas que venían sobre todo por el declive de calidad que observamos en las últimas series de Marvel. ‘Luke Cage‘ no terminó de convencer a muchos de sus espectadores mostrando un entorno mucho más interesante que la historia en sí; ‘Iron Fist‘ es un despropósito aburrido y desnortado; y ‘Los Defensores‘ tenía sus buenos momentos pero, por lo general, no terminaron entregar el gran colofón de acción prometido.

Estas dudas se disiparon tras el primer episodio. ‘The Punisher’ es buena serie. Steve Lightfoot, su guionista jefe, ha hecho muy buen trabajo para que podamos ver, por fin, una gran versión de El Castigador en la pantalla. Con sus fallos y con los síntomas que presentan todas las ficciones de Marvel/Netflix, incluyendo esa narración descomprimida que hace que el número de episodios sea claramente superior al que necesita la trama para desarrollarse adecuadamente, pero con un espíritu renovado.

«Bienvenido a casa, Frank»

La acción de ‘The Punisher’ se sitúa tras el final de la segunda temporada de ‘Daredevil’, donde despedíamos al antihéroe con su atuendo negro, su calavera y dado por muerto. El prólogo de la serie nos muestra lo que pasa después: cómo Frank Castle consuma su venganza contra todos los que participaron en la muerte de su familia y ahora decide mantener un perfil bajo retirado por completo de sus vidas anteriores.

Pero su pasado no le dejará en paz ya que descubre que todo lo que le ha pasado forma parte de una conspiración al más alto nivel relacionado con sus misiones. Aquí aparece Dinah Madani (Amber Rose Revah) agente de Homeland security recién llegada de Afghanistán con ciertas dudas sobre la política exterior de EEUU. También conoceremos a Micro (Ebon Moss-Bachrach), ex-analista de la NSA dado por muerto que se convertirá en un improbable (pero imprescindible y acertado) aliado del Castigador para desvelar este gran complot y deshacer la injusticia que supone.

Micro The Punisher

El comienzo de ‘The Punisher’ es explosivo y da pistas de lo que veremos a lo largo de la primera temporada de la serie: grandes ejemplos de la brutalidad que podemos esperar de una historia protagonizada por Castle. Pero también nos pide algo de paciencia, sobre todo en según que tramas y propone cierta calma a la hora de que conozcamos la historia que Lightfoot quiere contar.

Personalmente, sobre todo al comienzo de la serie, tengo la sensación de no existe un buen equilibrio entre la acción pura y el desarrollo de tramas y personajes. Cumple con las dos cosas: en el terreno de la acción, aunque hecho en falta algo más «ejército de un solo hombre» que me deje con la mandíbula en el suelo, está fantástica; y creo que el desarrollo de personajes es excelente y, de hecho, es de lo mejor que tiene. Sin embargo, en ocasiones tengo la sensación de que cuando la serie pide a gritos una escena explosiva, esta no corresponde.

Un polémico debate sobre las armas

The Punisher Karen Page

‘The Punisher’ sorprende, para bien, porque sabe desperdigar en sus primeros episodios varias subtramas. Algunas de las cuales se hacen algo pesadas al principio -como la del personaje encarnado por Daniel Webber o la que rodea a la mujer de Micro- pero que desprenden los temas sobre los que gira la serie más allá de la venganza: el «maltrato» a los veteranos de guerra, el uso de las armas, y como todos son peones insignificantes ante las élites del poder político y militar del país.

Hay un momento, en la segunda mitad de la temporada, en el que es más evidente este debate en torno a la célebre segunda enmienda de la Constitución de Estados Unidos que se une a otro en torno a las razones por las que alguien decide hacer un atentado. Steve Lightfoot sabe con qué personajes está tratando, por lo que vemos sus posturas respecto al tema claras y logra hacernos empatizar con el bando pro-armas.

Claro, quizás con todo lo que está cayendo ya no a nivel internacional, sino dentro de las fronteras de EEUU, a uno se le antoja este enfoque difícil de procesar o que no llega en buen momento. Pero por otro lado, el debate no tiene arras de zanjarse y ya hemos visto planteamientos parecidos en las últimas semanas en ‘American Horror Story: Cult’ y, en su lado más político, en ‘Sucesor designado’.

Un gran sabor al mejor Punisher de los cómics

Dinah The Punisher

Lo que definitivamente parece haberle venido bien a ‘The Punisher’ es que se distancie ya no del Universo Marvel de Netflix en cuanto en tanto presenta, al igual que todas las series «de protagonista único», una historia bastante independiente sino que, además se separa del Universo Marvel de los cómics. Prácticamente el único nexo en común con el resto de series es el personaje interpretado por Deborah Ann Woll, Karen Page.

Steve Lightfoot propone una historia que nada tiene que ver con la Mano o con algunos de las clásicas familias y organizaciones mafiosas a los que el Frank Castle se ha enfrentado a lo largo de sus aventuras comiqueras en lo que es «el canon normal». Al igual que en los cómics de los últimos años, primero en Marvel Knights y luego en MAX, esta es una independencia que le viene de perlas. Sin olvidarse de estar en un universo compartido, la serie no tiene miedo de desconectarse de él.

The Punisher Russo

Con ‘The Punisher’, Netflix parece resarcirse de sus últimos pasos en falso con los superhéroes de Marvel. O, más bien, parece por fin abordar el tema del vigilantismo en su esplendor. Un tema que, si bien aparece en otras producciones como ‘Daredevil’, en esta ocasión se elimina el debate sobre los límites del justiciero al autoproclamarse nuestro protagonista como juez, jurado y verdugo.

Sin ser magistral, ‘The Punisher’ es una buena serie: entretenida, bien realizada y con ganas de que sus espectadores disfruten. Aunque a ratos pide paciencia y cae en terrenos comunes de sus compañeras de plataforma, como ese típico momento en el que tiene que relentizar la historia porque la trama no da para trece episodios, este regreso del Frank Castle televisivo es todo lo que podíamos desear.

En Espinof | ‘The Punisher’ sabe exprimir la brutalidad del personaje sin dejar de lado la historia

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