Un peo de Grandes Ligas!, David Ortíz alborota en el dugout

Caribbean Digital

El legado ofensivo de David Ortíz perdurará por mucho tiempo: 2463 imparables, 539 jonrones y 1763 empujadas, son estadisticas dificiles de superar y más dificiles aún de olvidar.

Pero algo que jamás olvidarán Ortíz, ni sus compañeros en los Medias Rojas, es el día que el Big Papi se llegó “muerto del hambre” a un restaurancito y se comió tanto gusto un sancocho de habichuelas rojas con arroz y aguacate y horas más tardes, las habichuelas le pasaron la factura.


El juego estaba en su buena, el Papi estaba en chercha y coro con los tigueres en el dogout y de repente… un fuerte dolor estomacal y luego, soltó una bomba molotov que nadie, ni él mismo siquiera pudo soportar.

Tras semejante bombazo, todos hicieron el limpio… El bajo era tan grande que David, no pudo disimular,.. mira cómo ocurrió

Visto el caso, todos recordaremos a David Ortíz, como el bate más temible en las Grandes Ligas, el terror de los lanzadores contrarios y dueño de un carisma excepcional que hicieron de él sin lugar a dudas, el bostoniano más querido del béisbol. Pero quienes tuvieron que olerse el peo del montro en la cueva, no lo recordarán agradablemente.

clavedeportiva