Un comercio pérfido

Haití es el segundo país de importancia para la República Dominicana colocar sus productos.

Por José Manuel Castillo

Siempre he hablado del comercio desleal contra Haití. Este fin de semana tuve que ir a Dajabón por asunto familiar, y mientras caminaba me encontré con varias haitianas vendiendo productos de su país, o que llegan allá, por ejemplo, la rica y fuerte cerveza Prestige, ajo, cigarrillos, ron, caldo de pollo, producto para la higiene personal, y esta leche evaporada que compré, con el más alto estándar de calidad.

Pero sorpresa, no puedo adquirir muchas porque el Ejército corrupto de mi país me las quita, me llama a la atención que todos estos productos uno lo compra en Dajabón y delante de los guardias, y no te dicen nada, pero en 10 chequeos que existen entre Dajabón y Santiago, te revisan el vehículo, y hasta la licencia de conducir me pidieron en el puesto de Copey, Montecristi. Por suerte no me quitaron un poco de Ajo que traía, comprado a 50 pesos la libra.

Leche evaporada Bongú.

No es justo que nosotros le vendamos de todo a ellos, sin embargo, en nuestros supermercados no encontramos productos traídos desde la hermana nación.

Si nuestras autoridades hicieran su trabajo, y decomisaran todo lo que se vende de este lado, uno no compraría, pero el negocio es, que los dominicanos compremos en el pueblo centinela de la patria, para luego los soldados robarnos la mercancía.

Aunque le soy sincero, venia preparado, para emburujarme con cualquier custodio, si intentaba adueñarse de lo que me costó mis cuartos.

«La palabra es para decir la verdad, no para encubrirla’
José Martí

Ajo procedente de Haití.