Un cambio histórico…

Por Domingo Hernández
Dentro del béisbol, a todos los niveles, es común que se produzcan cambios de jugadores entre los equipos de una liga determinada.
Ahora bien, resulta sumamente raro que haya un cambio de managers entre dos organizaciones.
No obstante,en 1960, a principios del mes de agosto, se originó un cambio de dirigente en Grandes Ligas entre los Indios de Cleveland y los Tigres de Detroit.
Ocurre que Joe Gordon, que para entonces dirigía a los Indios de Cleveland, pasó a dirigir a los Tigres de Detroit, mientras Jimmy Dykes, que previamente estuvo a cargo de Detroit, asumió las riedas de los Indios.
Aquello fue histórico, porque en los 84 años de béisbol organizado que hasta entonces habían transcurrido, no existía un precedente en ese sentido.
Es prudente señalar, que las razones de ese cange fueron las mismas que regularmente motivan los cambios en los jugadores: En busca de mejores resultados entre los negociadores, en este caso los gerentes de los equipos.
En aquella ocasión, Frank Lane, que para la época era el administrador general de los Indios, explicó sobre el particular,» No hemos estado logrando los resultados que necesitamos. Lo mismo ocurre con Detroit.Ambos equipos han tenido dificultades para mantenerse en buena posición en las clasificaciones».
Así  expuso Lane la motivación que originó la medida, lo que en cierto modo es similar a lo que ocurre cuando una franquicia cambia un jugador por otro, pues lo que busca es lograr que el que adquiere pueda rendirle más que el que envía al otro conjunto.
Ahora bien, este cambio de dirigentes, al parecer fue «debut y despedida», en razón de que la práctica fue descontinuada. No se escucha que se produzcan negociaciones de este tipo con managers. Lo que sí ocurre  con frecuencia, es que el piloto sea despedido del club y luego se contrate  otro para que lo sustituya.
De todas formas, el caso de Gordon y Dykes es uno de esos episodios  extraños que se producen dentro del béisbol,un deporte rico en acontecimientos insólitos, muchos de los cuales suelen pasar desapercibidos para la inmensa mayoría de aficionados. PARA QUE LO APRENDAS O LO RECUERDES:En 1967, aunque no terminó como líder en bate, Mateo Rojas Alou, uno de los más finos bateadores dominicanos de todos los tiempos, conectó para promedio de 338, al conectar 186 hits en 550 turnos al bate. Para entonces Mateo militaba con los Piratas de Pittsburgh. !Suena la campana! !Climmp!