JOSE ALFREDO ESPINAL
Editor/Caribbean Digital
Si, es cierto, lamento no adherirme al pensamiento e intereses de muchos sectores, incluyendo al periodístico.
SANTIAGO, República Dominicana./ Como ciudadano dominicano tengo el derecho de apoyar o no al gobierno de turno.
Tengo derecho de beneficiarme de las ayudas que deberían ser “responsabilidades” propiciadas por el gobierno, como son viviendas, alimentos, transporte, salud y educación.
Tengo el derecho de respaldar a la oposición y favorecerme con la administración gubernamental.
Tengo el derecho de ser cristiano católico, evangélico, del séptimo día, adventista, y de cualquier otra religión. Tengo el derecho de apoyar a un equipo de béisbol de la capital, aunque viva en el Cibao.
Tengo derecho de ser yo, con mis virtudes y defectos.
Todo ese derecho tengo porque pago al Estado dominicano energía eléctrica cara y mala, servicios de agua potable, marbete de vehículos de motor, seguro médico y pago combustible muy caro, a parte de los servicios privados como la televisión por cable, internet, celulares, entro otros.
Además de estar al día en el pago de mis impuestos.
¿Cuántos hay que no hacen nada de eso y se benefician muchísimo del gobierno? ¿Por qué yo no puedo hacerlo?
No puedo hacerlo porque en un momento determinado cuestiono al gobierno de turno, cualquiera que sea, a los funcionarios acusados de corrupción y el pobre sistema social que vivimos.
Si, es cierto, lamento no adherirme al pensamiento e intereses de muchos sectores, incluyendo al periodístico.
Los bomberos no se pisan la manguera, pero yo diría si no es necesario.