Según el analista en temas militares Dave Majumdar, editor de Defensa de la revista ‘The National Interest‘, una nueva generación de misiles de largo alcance aire-aire de China y Rusia junto con sus aviones de combate más modernos, amenazarían el funcionamiento de la cadena logística de operaciones aéreas estadounidenses.
Dave Majumdar resalta que las armas de intercepción y ataque de largo alcance, en conjunto con una aeronave de combate adecuada, podrían ser suficientes para cortar elementos en la cadena logística de guerra estadounidense y de esta manera no le permitirían desarrollar operaciones aéreas sostenidas tanto en la región de Asia Pacífico, como en Europa.
«Estos nodos incluyen los sistemas de alerta temprana y control aerotransportado (AWACS, por sus siglas en inglés), varios activos de inteligencia, vigilancia y reconocimiento, aviones cisterna y sistemas aéreos de guerra electrónica», puntualiza el experto.
En torno al escenario de un posible enfrentamiento, el experto explica que esencialmente las Fuerzas Armadas rusas y chinas podrían emparejar sistemas como los rusos R-37M RVV-BD Vympel, KS-172 Novator (también conocido como K-100) y el chino PL-15 con aeronaves como los cazabombarderos de quinta generación T-50 (PAK-FA) (ruso), Chengdu J-20 (chino) y el caza biplaza supersónico de gran radio de acción MiG-31 (ruso), con el objetivo de aniquilar la cadena logística de guerra de la aviación estadounidense.
«Especialmente en los vastos territorios del Pacífico, donde los centros aéreos son pocos y bastante alejados entre sí, los aviones cisterna podrían convertirse en un ‘talón de Aquiles’ que Pekín podría elegir para explotar», añade el analista en temas militares.
Majumdar concluye señalando que es probable que el despliegue ruso y chino de misiles de largo alcance aire-aire en combinación con los aviones de combate de quinta generación generen un problema significativo para el Pentágono. «Es un problema que se verá en los próximos años«, subraya el experto.