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SANTIAGO.-Fueron sepultados este sábado en la Cripta de la Catedral Santiago Apóstol, los restos del obispo santiagués, monseñor Roque Adames Rodríguez, al conmemorarse el quinto aniversario de su fallecimiento.
Previamente, los despojos mortales del obispo fueron exhumados de la parroquia La Anunciación de la Pontificia Universidad Católica Madre y Maestra, donde fue enterrado en virtud de que fue rector de ese centro superior académico.
Posteriormente, el cadáver fue llevado a la funeraria Blandino de la avenida 27 de Febrero,donde permaneció hasta las primeras horas de la mañana de este sábado.
Pasada las 9:30 de la mañana, se procedió a la celebración de una solemne Eucaristía, celebrada por monseñor Ramón Benito de la Rosa y Carpio, así como el obispo emérito monseñor Jesús María de Jesús Moya, monseñor Agripino Núñez Collado y otros sacerdotes del arzobispado local.
Tras su sepultura en la Cripta, que está en el sótano de la Catedral Santiago Apóstol, a monseñor Roque Adames Rodríguez se les rindió homenaje con varios rezos y oraciones y el depósito de una ofrenda floral. En el lugar, fue colocado un amplio retrato del fenecido, así como varias frases de éste.
Durante la homilía para la ocasión, monseñor Ramón Benito de la Rosa y Carpio resaltó que monseñor Adames no atesoró riquezas y que regaló en vida a la Universidad Católica Madre y Maestra, una costosa biblioteca.
A la actividad asistieron representantes de diversos sectores de la sociedad y parientes del obispo.