Robos y atracos siembran temor en Jacagua; habitantes denuncian de noche es “toque de queda”

Caribbean Digital

Habitantes en la comunidad de Jacagua y localidades aledañas denunciaron que los robos y los constantes atracos en la vía pública los mantienen atemorizados y han sembrado una especie de “toque de queda” porque desde que oscurece los lugareños se guarecen en sus viviendas debido a la situación imperante.

Foto de archivo
Foto de archivo

Expresaron que la ola de acciones delictivas ocurre a cualquier hora del día o de la noche ante la deficiente y poca actuación de los agentes policiales que laboran en el Destacamento de la Policía Nacional en Jacagua.

Recordaron que en la referida comunidad han ocurrido asaltos e intentos de atracos a familias completas en sus respectivas casas.

Precisaron que la ola delincuencial es tan espantosa que se ha convertido en un temor generalizado y permanente entre los habitantes de la laboriosa localidad de Jacagua.

Manifestaron que los delincuentes tienen lugares específicos para atracar en horas de la noche en la avenida Circunvalación Norte, llegando a Jacagua; y todos los policías y oficiales que están de puesto en el cuartel de allí tienen conocimiento de la situación, pero no actúan ni para prevenir  y ni para combatir el delito.

Significaron que los delincuentes utilizan diversas modalidades para atracar, recordando que en una ocasión penetraron a una finca, sustrajeron una vaca, la colocaron en medio de la vía y una joven mujer que conducía una jeepeta, en horas de la madrugada, chocó contra el animal.

Explicaron que la muchacha  no sufrió golpes de consideración, pero los pillos le robaron todas sus pertenencias, mientras el vehículo quedó muy averiado.

Los quejosos pidieron al general Luis Eduardo Then, director de la Dirección Regional Cibao Central de la Policía Nacional, con sede en esta ciudad, intervenir el cuartel de Jacagua y trasladar a los policías e instruir a sus relevos a que actúen drásticamente contra la delincuencia porque, aparte de estar cansados de esa situación, viven una vida muy atemorizada.