Por Domingo Hernández
José Bautista acaba de ser cambiado a los Filis de Filadelfia desde los Mets de Nueva York.
El veterano jugador utility de República Dominicana, tras conseguir trabajo un poco tarde en la presente estación y registrar un pobre inicio con los Bravos de Atlanta, quienes lo licenciaron, ha ido reencontrándose poco a poco, a partir de su llegada a los Mets.
Es cierto que su bateo no ha sido extraordinario y que no pudo con los Mets exhibir todo el potencial que se esperaba de él.Empero, en lo que respecta a su porcentaje de embasarse (373) estuvo bastante bien, aún cuando en agosto descendió considerablemente en el plano ofensivo, lo que a lo mejor influyó para que los metropolitanos lo pusieran en la lista de waivers.
Su llegada a los Filis, no obstante, podría favorecer al nativo de Santo Domingo, en razón de que se trata de un equipo contendor y con ampias posibilidades de pasar a la postemporada.
Esta nueva casa, bien pudiera impregnar una mayor motivación en Bautista, quien podría experimentar un repunte que lo conduzca a lograr reencontrarse a si mismo y retomar en parte el nivel de estelaridad que vivió con los Azulejos de Toronto, conjunto éste último con el que logró sus mejores años de su ya larga carrera de 15 en las mayores.
Ello, empero, va a depender en mucho de las oportunidades de juego que reciba como jugador reserva, papel al que se supone estará destinado.
A los Filis también le favorece la llegada de Bautista, quien puede aportar en momentos claves del juego con su poderoso bate -suma un total de 342 jonrones-, así como con su vasta experiencia a los jóvenes valores del conjunto, quienes son mayorؙía, muy en especial en los playoffs,cuando suelen vivirse períodos de presión. Ya veremos.
Grave…
Muy grave la acusación sobre David Ortiz en el sentido de que supuestamente habría apostado durante su época de jugador activo.
Las acusaciones estarían incluidas en el libro Baseball Cup: The Dark Side o America’s Nacional Pastine, escrito por Eddie Domínguez, un antiguo encargado de seguridad de los Medias Rojas de Boston. De esto resultar cierto, algo que nos resistimos a creer y de lo que dice el autor no tener pruebas -lo que, dicho sea de paso, es pasible de demanda-, las consecuencias serían catastróficas para su gloriosa carrera, básicamente con miras a su futura inclusión en el Salón de la Fama e incluso el desprestigio que ello conllevaría.Hay que esperar. PARA QUE LO APRENDAS O LO RECUERDES:Osvaldo Virgil, primer dominicano en jugar en Grandes Ligas (1956), fue una especie de utility, pues en ocasiones, además de jugar otras posiciones, se desempeño como receptor (temporadas 1960-62 y 1965-66). !Suena la campana! !Climmp!