Otro vaticinio cumplido

Por: Ramón Antonio Veras
 
El béisbol es un deporte no fácil de predecir sus resultados, porque en el mismo intervienen factores que van desde las habilidades de los jugadores hasta la mercancía dinero.  No obstante,  un análisis minucioso puede permitir anunciar cuál sería el resultado de un encuentro  o una serie de partidos. 
 
Un día antes de comenzar el  Round Robin,  entre los equipos Gigantes del Cibao, Leones del Escogido,  Tigres del Licey y Águilas Cibaeñas, en el curso de una  conversación  sostenida con el  productor de televisión Haime Thomas,  este me preguntó  cuáles irían a la final. Le respondí a mi amigo que en la final estarían Licey y Águilas.
 
Al día siguiente del coloquio,  Haime,  en el segmento  La Hora Estelar, le comunicó a su compañero Carlos Manuel Estrella,  cuál había sido mi pronóstico. Precisamente, en estos momentos  acaba de concluir el Round Robin, y los conjuntos que van a discutir el campeonato son  Tigres del Licey y  Águilas Cibaeñas, tal como lo había previsto.
 
En otro orden, la debilidad de las Águilas Cibaeñas, para enfrentarse al Licey, está en el picheo intermedio. Al  conjunto aguilucho se le hace difícil conservar la ventaja, si la tiene, del sexto al octavo inning. Además, la ausencia de Zoilo Almonte, representa una debilidad en la ofensiva del equipo   cibaeño. Ahora mismo, no sé los jugadores escogidos por las Águilas Cibaeñas, en la repartición de los jugadores pertenecientes a los descartados Leones del Escogido y Gigantes del Cibao.