Max Puig: “Llegó la hora de cambiar el modelo político y económico del país”

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El doctor Max Puig aseguró que ha llegado  la hora de cambiar el modelo político, económico, social y cultural que ha predominado en el país en los últimos cincuenta años.

Max Puig. Archivo.

Al ser proclamado la noche de este jueves por la Alianza Por la Democracia (APD) y un grupo de organizaciones sociales y comunitarias como su candidato presidencial para las próximas elecciones,  Puig prometió gobernar con las personas más capacitadas de cada sector, independientemente de cuál sea su partido político.

En tal sentido convocó a todas las organizaciones sociales y los dominicanos de buena voluntad a reunirse en todo el país en asambleas ciudadanas para aportar las propuestas y prioridades a ser integradas  su programa de gobierno.

Al prometer que esas propuestas no se quedarán en el papel, sostuvo que tanto en su campaña electoral como desde la presidencia de la República, la transparencia total y la más amplia participación social, serán las protagonistas.

No obstante, adelantó algunas de sus propuestas como restaurar la credibilidad del Estado y la  confianza de la ciudadanía.

La organización política que presido, la Alianza por la Democracia, me propone como candidato a la presidencia de la República. Aquí, ante ustedes, acepto el reto”, proclamó el doctor Puig durante el acto de proclamación en el Hotel Meliá, de esta capital.

En el punto en que me encuentro en el camino de la vida tengo los conocimientos, la experiencia, la sensibilidad y la entereza necesarios para asumir la presidencia de la República, agregó.

Otra de sus propuestas es tomar medidas enérgicas de racionalización y de profesionalización de la función pública, eliminando  los privilegios irritantes y las prácticas administrativas dolosas e ineficientes.

No más barrilito, ni cofrecito, ni nominillas, ni botellas, ni regalos denigrantes de la dignidad de las personas, dijo

Prometió colocar las mujeres en el centro del proceso de desarrollo,  imponer la transparencia en los contratos públicos y trabajar  para que se aclare el rol y la acción del Banco Central, se apliquen las normativas internacionales a la banca, se reforme la Cámara de Cuentas para dotar al Estado de un control externo y eficaz, se racionalice  el gasto público y se cumpla la ley de presupuesto.

Igualmente, mejorar el organigrama del Estado, reduciendo el número de vice ministros a lo que establece la ley, cancelando los supuestos diplomáticos dominicanos que se encuentran en el país cobrando en dólares sin trabajar y reagrupando las instituciones que tengan competencias similares.

De la misma manera,  propone eliminar las supuestas ayudas y dádivas basadas en clientelismo y  favoritismo, ofrecidas por instancias cuyas funciones son otras.

Crecimiento con injusticia social

El ex ministro de Trabajo explicó que la República Dominicana es el país de América Latina y el Caribe que ha tenido el más alto crecimiento económico promedio durante las últimas cinco décadas.

Sin embargo, consideró,  que en los últimos cincuenta años el país ha estado organizado sobre la base de un modelo de crecimiento económico con injusticia social, donde pocos tienen mucho y muchos tienen poco.

Dijo que  la economía se ha sustentado en un modelo político de control de la sociedad basado en la demagogia y el clientelismo y, al final de cuentas, en la corrupción que los alimenta.

Consideró que esto es resultado  de  una democracia pervertida en la que se manipula la voluntad de las personas aprovechándose de sus necesidades más elementales.

Esto nos ha llevado, agregó, a una sociedad fracturada y desesperanzada, en la que tienden a florecer el delito y la inseguridad, una sociedad frágil y no sostenible.

Sin embargo considera que el país  puede salir adelante y “llegó el momento de renovar la esperanza”.

Se preguntó, el cómo es posible que a 50 años después del  ajusticiamiento de Rafael Leónidas Trujillo el país ocupe los últimos lugares en escolaridad entre las naciones del área.

Además que  el promedio de la mujeres que mueren durante el parto  sea uno de los más elevados de América Latina.

Una situación igual, agregó, tenemos en  el servicio de agua potable, y   energía eléctrica

Dijo que solo el 30% de los dominicanos en capacidad de trabajar disponen de un empleo formal, 14 están desocupados y 56 se desenvuelven dentro de la llamada economía informal, sin ningún tipo de protección social.

Apoyo.

Puig dijo que su gobierno prestará todo su apoyo a las micro, pequeñas y medianas empresas, garantizando el fiel cumplimiento de la ley de las MYPIMES, en cuanto a la facilitación de crédito  y capacitación.

Promete salarios justos y decentes a los trabajadores de manera que el incremento de la productividad se distribuya equitativamente entre empleados y empleadores.

El programa de cambios, dijo,  debe incluir una reforma tributaria que exonere la producción, elimine los mecanismos de evasión fiscal y sirva como instrumento para la redistribución del ingreso y la riqueza.

“Trabajaré para aumentar la eficiencia y la calidad del  gasto público. Priorizaré el gasto social, y de manera particular el gasto destinado a la educación, la salud, el combate a la pobreza extrema, así como a las inversiones que contribuyan a elevar la competitividad sistémica del país y generar empleos de calidad”, dijo.

Adelantó que “cada chele” gastado en su gobierno será sometido al más estricto control técnico y legal, pero sobre todo al control socia además de que todas las inversiones públicas contarán con auditorías sociales, en las que participarán representantes de todos los sectores sociales y religiosos.

Prometió mejorar y ampliar los programas de transferencias condicionadas de efectivos y aportes focalizados, como es el caso de Solidaridad, Comer es Primero, Bono Gas y los demás programas existentes de las mismas características.

También aplicar  ley que le asigna el cuatro por ciento del Producto Interno Bruto a la educación y la eliminación del analfabetismo

Terminó diciendo “no creo en ofrecer lo imposible. Pero creo en el esfuerzo común que dará como resultado una nueva nación”.