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Su próximo paso es ir con una beca a la universidad y de ahí pasar a las Grandes Ligas.
“Es la meta que siempre desee en este nivel desde que empecé seriamente mi carrera, de convertirme en el mejor de mi equipo y creo que la he superado”, expresa Silfa.
Silfa juega actualmente con los Bulldogs de PCTI y cuenta que una de las mejores experiencias que ha tenido en esta temporada fue cuando conectó un doble con bases llenas para empatar un juego en el último inning. “Esa experiencia me enseñó a nunca rendirme aunque todos los pronósticos estén contrarios al triunfo”.
El novato de 5’8 y 148 libras, cuya posición en los Bulldogs es “shortstop”, tiene una velocidad de corrida de 6.6 segundos en la 60 y un promedio en bateo de .410.
De padres dominicanos, nacionalizados en EE.UU., Silfa dice que desde que comenzó a tomar este deporte seriamente, y practicar con deseos de ser el mejor, lo que antes veía difícil, ahora lo produce de manera natural.
Explica que en los últimos campeonatos ha conectado por los menos dos hits por juego.
Ahora ve cada día más cerca la posibilidad de obtener una beca para jugar en la universidad, y después, firmar para un equipo de las Grandes Ligas, y convertirse en un estelar.