Hermanos Herrera dedicados a forjar peloteros para el béisbol de Grandes Ligas

EL TORO, Guerra. Los hermanos Wellington y Josué Herrera, después de ser peloteros profesionales, desde hace cinco años se han dedicado a formar jugadores y ayudarlos a cumplir sus sueños de llegar al béisbol profesional, gracias al programa de béisbol “Herrera Family”, ubicado en la comunidad de El Toro, en el municipio de Guerra.

“Ustedes son Caballos, vamos a calentar”, fueron las primeras palabras de Wellington, antes de iniciar un try-out de 20 jugadores con edades entre 15, 16 y 17 años que fueron presentados a 15 organizaciones de Grandes Ligas.

Wellington, el menor de los Herrera, fue supervisor de scout en las Antillas Holandesas y en Venezuela para la organización de los Padres de San Diego, posición que le dio la oportunidad de trabajar en la preparación de los Grandes Ligas Jurickson Profar, de Texas; Xander Bogaerts, de Boston; Didi Gregorius, de los Yankkes; y Kyle Jensen, de los Dodgers.

“Nosotros trabajamos en base al concepto de la disciplina y la moral, para que estos peloteros puedan tener un comportamiento adecuado tanto dentro como fuera del terreno y que así sean profesionales en todo el sentido de la palabra”, expresó Wellington.

“Lo primero que hacemos cuando llegamos aquí es encomendarnos a Dios, para que él sea quien dirija nuestra labor y esa es la razón por la que hemos tenido buenos resultados en la formación de jugadores”, agregó.

Los Herrera cuentan con más de 25 años de servicio al desarrollo y descubrimiento de peloteros. Gracias a la experiencia adquirida, se le es fácil identificar el talento que posee el joven cuando llega a la academia.

Josué Herrera, hermano mayor, fue director de scout internacional para los equipos Piratas de Pittsburgh e Indios de Cleveland, organizaciones para la cual trabajó por 10 años. Dicha posición le dio la oportunidad de trabajar a las estrellas Carlos Santana, Jhonny Peralta y Fausto Carmona (hoy Roberto Hernández).

“Identificamos a jóvenes con talento, pero que necesitan ser desarrollados. Ahí entra nuestra capacidad, porque no se trata de sólo tener talento, estos muchachos necesitan orientación y alguien que los ayude a pulir ese talento en bruto que poseen”, manifestó Josué.

Asimismo, dijo que aparte de formar un buen pelotero, tratan de que también sean jóvenes de bien, ya que de esto depende su estadía en el béisbol cuando sean estrellas de Grandes Ligas. “Yo como cristiano que soy trato de que ellos pongan a Dios por encima de todo, para que el éxito siempre esté de su lado”.

Recientemente los Bravos de Atlanta ofrecieron 3 millones 500 mil dólares a un jardinero cubano que pertenece a la academia Herrera Family, que según Wellington y Josué, posee las herramientas para ser un pelotero del nivel de Yoenis Céspedes, estrella cubana de los Metros de New York.

Source link