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TIERRA DURA, Espaillat, Rep. Dominicana.-Los moradores organizados de Tierra Dura y El Higuerito se lanzarán a la calle en las próximas horas como reacción a lo que entienden “fue un desaire” del ministro de Obras Publicas (OP), quien los dejo esperando a pesar de que representativos de la gobernación provincial habían prometido que visitaría la zona.
Cientos de pobladores de estas comunidades y otras vecinas se reunieron ayer y al principio tenían gran expectativa porque plantearían directamente a Gonzalo Castillo su problemática, sin embargo el ministro de OP “ni el pelo se dejo ver” y esto mantiene en completa indignación a los grupos comunitarios y otros que reaccionaron advirtiendo que se lanzaran a la protesta a partir de la próxima semana.
La semana pasada cientos de residentes en Tierra Dura, El Higuerito y comunidades circunvecinas
Empero, a pesar de que alegan que paso “el día” de ayer en Moca, el funcionario no se apareció por Tierra Dura y esto lo entienden como una falta de respeto y una irresponsabilidad ya que habían cientos de personas congregadas desde temprano en su espera.
“Iniciamos de nuevo la lucha por la carretera ya que el ministro de Obras Publicas nos dejo con los moños echos y no por aquí”, advirtió Juan Compres del reconocido grupo de lucha “Los Peregrinos de Moca”, quien una vez protagonizo una caminata desde esta ciudad hasta Santo Domingo para reclamar obras comunitarias.
Víctor Bretón, dirigente del Frente Amplio de Lucha Popular (FALPO), que apoya los reclamos de los moradores de Tierra Dura, dijo que este desplante del ingeniero Gonzalo Castillo “es una bofetada en pleno rostro contra estas comunidades”.
Este fin de semana los representativos de la Asociación de Madres de Tierra Dura Nuestra Señora de la Altagracia, Junta de Vecinos de Tierra Dura Abajo, las iglesias cristiana Tierra Santa, la católica, la Asociación de Madres La Unión de Tierra Dura Arriba, la Asociación Juvenil Nuevo Renacer y la Pastoral Juvenil, volverán a reunirse para plantear los próximos pasos de lucha a seguir.
Pero de antemano hay consenso, dijeron Bretón y Compres por separado, de que se programe una paralización total de actividades con quemas de neumáticos y corte del trafico por la emblemática autopista Ramón Cáceres, que empalma a Moca con el resto del país por el sur-sureste.
“No queremos llegar a esos extremos, dijeron los dirigentes del FALPO y Los Peregrinos, pero es el camino que nos dejan las autoridades, ya que no hacen caso a nuestras peticiones de mejores carreteras y caminos vecinales para poder transitar libremente hacia los centros urbanos”.
Recordaron que durante la marcha de la semana pasada los participantes advertían: “Si no hay calles, hay candela”, “esta lucha va a llegar al Palacio Nacional”, “esta lucha va pa’lante, no hay gobierno que la aguante” y “si no resuelven, candela, candela”, y esto mas que simples consignas es la disposición y la voluntad que existe en Tierra Dura y El Higuerito.
PRINCIPAL EXIGENCIA
La mayor exigencia es que se reconstruya el principal tramo carretero que empalma a la comunidad con la autopista Ramón Cáceres. Piden otras obras pero la rehabilitación de esta vía de comunicación terrestre es la prioridad por el momento. “Y esta no es cosa del otro mundo ya que en el país se destinan cuantiosos recursos a obras de menos importancia”, alegan.
Los moradores de esta productiva zona, que sobresale a nivel nacional por su famosa artesanía, entre ellas la reconocida “Muñeca sin rostro” con fama nacional e internacional, dicen que se sienten aislados por la falta de caminos en buenas condiciones.
Deploran el que las autoridades del gobierno, tanto local como nacional, se hayan olvidado de esa comunidad a pesar de los grandes aportes que hace a la economía dominicana y, por consiguiente, al Producto Bruto Interno (PBI)
A través de los grupos representativos, los residentes en Tierra Dura y El Higuerito reiteran que hasta ahora su lucha es pacífica, pero que si no ven soluciones a corte plazo, se lanzarán a una huelga por tiempo indefinido responsabilizando a las autoridades de las consecuencias que se deriven por su actitud negligente e irresponsable frente a las demandas planteadas.