En República Dominicana partidos adolecen de liderazgo político

Por Ibelka Viviana Ureña

Especial/Caribbean Digital

En Republica Dominicana la política se ha distorsionado. Hoy, cualquier ciudadano sin capacidad ni conocimiento lanzan sus aspiraciones a candidaturas políticas, es como que el estar en un cargo, que lo represente fortalece su ego y en mayoría posición económica. La crisis política ha llevado a las divisiones de los partidos.partidos

El partido Reformista Social Cristiano (PRSC), un partido populista, ya no es ni una cuarta parte de lo que fue en los años 70 al 96, hoy carece de liderazgo y se están organizando para renacer de nuevo con un perfil muy bajo.
El Partido de la Liberación Dominicana (PLD), un partido de tendencia centrista y liberal, que durante años se mantuvo en el anonimato, su fuerza renació como una avalancha al realizar alianza con el (PRSC), manteniendo la mayoría y el poder por largos años y se mantiene ahora con un acuerdo de gobierno compartido, donde ha negociado con la mayoría de los partidos que fueran de mayor importancia en el país.

El Partido Revolucionario Dominicano (PRD), un partido de orientación socialdemocrata y de centro político, que se mantuvo en el primer lugar por la preferencia del electorado, hoy día está prácticamente en el anonimato pues la alianza con el partido de gobierno ha traído mucho descontento en muchos de sus dirigentes el cual se han ido a otras plazas y en vez de ser un partido opositor se convierte en aliado.

El Partido Revolucionario Moderno (PRM), de orientación socialdemócrata, laborista y de centro-izquierda, ha surgido por la necesidad de una oposición al gobierno, el cual conserva los ideales del Doctor José Fco. Peña Gómez, y con líderes innovadores fresco para dar una esperanza al pueblo dominicano, quien ha perdido la confianza en los gobernantes de las últimas décadas.

Aunque tradicionalmente los partidos políticos poseen cierta inclinación ideológica, en República Dominicana no es el caso, al momento de hacer bloques o alianzas, llegando a entremezclarse partidos de derecha, cristianos, humanistas, izquierdistas, laboristas y de centro sin distinción alguna entre unos y otros.

La mayoría de los partidos minoritarios han surgido como escisiones de los partidos mayoritarios, ya sea para apoyar las aspiraciones presidenciales de alguno de sus líderes, o por diferencias internas entre grupos de estos partidos, y los emergentes que al final es solo un negocio para quienes lo encabezan el cual cada cuatro años cobran su jugosa suma de dinero y viven en un negociar con los partidos mayoritarios para poder mantener su presencia frente a la Junta Central Electoral, el país necesita volver a creer en sus líderes y en quienes lo representen, ya que por la ambición de los que participan en la política ha hecho que el deseo de levantarse temprano para decidir los destinos de una nación haya perdido el interés por las falsas promesas y doble cara de los que participan en el mundo político.