El día 21 de mayo cumple 65 años, y para celebrarlo por todo lo alto, Mila Ximénez se ha regalado un nuevo rostro. Siguiendo los pasos de su compañero de programa Kiko Matamoros, la colaboradora de Sálvame se ha hecho un lifting facial. Sin embargo, el procedimiento ha sido completamente diferente al que se empleó en el caso de Matamoros.
Ella se ha sometido a la técnica vanguardista que eligen, mayoritariamente, las celebrities: el ‘endorlifting’ o ‘lifting’ endoscópico facial, que cumple con el mismo objetivo que el lifting convencional. Es decir, se consigue rejuvenecer a través del estiramiento y reposición de la piel, pero sin cicatrices. Y esta es la mayor diferencia con la técnica que se empleó con Kiko, operado en octubre del 2015.
Cuando reapareció en pantalla, lo hizo hinchado como un pez globo y mostrando grapas, bultos y esparadrapos, dejando a los compañeros y telespectadores muy impactados. Es cierto que su regreso fue precipitado, pero a él no pareció importarle relatando todas sus operaciones. Y publicó en Instagram una foto con la cabeza vendada. Todo lo contrario que hace Mila, que dio plantón a los fotógrafos y se fugó por la puerta de Urgencias del Hospital San Francisco de Asís (Madrid). Y ya advirtió que se iba a tomar, mínimo, cuatro semanas antes de aparecer con su nuevo look. En cuanto al tiempo de quirófano para una y otra intervención también hay diferencia: la de Kiko duró seis horas; la de Mila, cuatro.
El experto
Para conocer más a fondo el procedimiento endoscópico, entrevistamos al experto en cirugía endoscópica frontal, el doctor Javier de Benito, uno de los pioneros –desde 1998– en realizar este tipo de operaciones en España: «Las diferencias más importante entre el lifting endoscópico, respecto al quirúrgico tradicional, son las cicatrices mínimas, el resultado muy natural y la rápida recuperación».
Tiene la ventaja de estirar la piel sin necesidad de cortar y suturar»
Y continúa«Es una intervención mininvasiva, en la que trabajo usando un endoscopio. Con este se consigue que las pequeñísimas incisiones sean más planas que las de un lifting tradicional y queden después escondidas dentro del pelo. Este tipo de cirugía tiene la ventaja de estirar la piel sin necesidad de cortar y suturar, como sí se hace en el ‘lifting’ convencional. Además, no se realiza la incisión en una sola línea, sino que se hacen pequeños cortes que van desde la parte de atrás del lóbulo de la oreja pasando por el cuero cabelludo».
‘Lifting’ frontal
Gracias al endoscopio esta intervención es muy rápida y nada traumática. La elevación de las cejas se realiza mediante una cirugía mininvasiva. Basta con una sola incisión de un centímetro en la zona del cabello. Con endoscopia y la ayuda de una cámara, las cejas vuelven a recolocarse en la zona deseada. Además de la ceja, se trabajan también las arrugas de la frente, el entrecejo y la zona periorbital. Su precio oscila entre los 6.000 a 8.000 euros.
Para el doctor, el lifting endoscópico es el ideal para pacientes que no quieren realizar cambios excesivos en su aspecto, una de las obsesiones de Mila, que admitió sentir pánico a «convertirse en otra». Sin embargo, tras perder 16 kilos en la pasada edición de Supervivientes, comprobó cómo se le había «caído la cara» y ha puesto remedio. Ahora hace falta comprobar el resultado.