Director del INFOTEP analiza impacto de formación técnica en zonas francas

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SANTIAGO, RD.– Conferencia “Impacto de la Formación Técnico Profesional en el sector Zonas Francas: Un modelo de gestión compartido”, dictada en CAPEX, por el Lic. Rafael Ovalles, director general del Instituto Nacional de Formación Técnico Profesional (INFOTEP). La conferencia fue organizada por la Corporación Zona Franca de Santiago.

Apreciados amigos y amigas:

Quiero expresar la profunda satisfacción que me causa estar hoy con ustedes para intercambiar opiniones sobre la colaboración entre el sector de zonas francas y el Instituto Nacional de Formación Técnico Profesional, cuya dirección general me honra desempeñar.

Agradezco también desde el inicio al artífice de este encuentro: el señor Miguel Lama, presidente del Consejo de la Corporación Zona Franca Industrial de esta pujante provincia.

Ocasiones como esta amplían la perspectiva mutua sobre la necesidad de apretar el lazo colaborativo entre quienes crean riqueza –en este caso, el sector de zona franca— y quienes como nosotros en el INFOTEP trabajamos sin descanso por mejorar la calidad de la formación que ofrecemos alos trabajadores y trabajadoras.

En la amable carta de invitación a este encuentro se me pide exponer ante ustedes, cito, “los frutos que ha dado esta gestión de excelencia y compromiso que lleva a cabo la entidad bajo tu dirección”. Una ponderación elogiosa que agradezco, tanto por el personal técnico, docente y administrativo del INFOTEP, como por lo que me toca como director general de la institución.

De esa opinión deseo resaltar dos palabras, que son al mismo tiempo conceptos: una, “excelencia”; la otra, “compromiso”.  Debo decir ante ustedes, sin innecesaria modestia, que labúsqueda de la excelencia está inscrita en el ADN de nuestra gestión, y que el compromiso es la argamasa de todas las decisiones del INFOTEP para hacer de la formación técnico profesional una cantera de trabajadores y trabajadoras de incuestionable calificación.

En pos de esa meta, hemos  ampliado durante estos casi tres años nuestra oferta formativa; hemos emprendido proyectos como la Escuela de Hotelería, Gastronomía y Pastelería, cuya infraestructura se levanta en Higüey para apuntalar al sector turístico de la zona, y hemosconstruido nuevas edificaciones en Santo Domingo y Santiago, equipadas con tecnología de punta.

Otro logro del que nos enorgullecemos es la apertura en esta ciudad de Santiago de un taller de calzado para formar técnicos en producción y diseño. Como saben ustedes la República Dominicana es el mayor exportador de calzado a los Estados Unidos de todos los países que integran el DR-CAFTA.

Aprovechar ese nicho de mercado, y fijarnos metas expansivas, requiere que nuestros técnicos y operarios posean las competencias requeridas por un mercado internacional cada vez más exigente. A ello contribuimos con este taller, apoyado de manera entusiasta por el presidente Danilo Medina y con la asistencia técnica de la República China Taiwán.

Son estos apenas cuatro ejemplos de los caminos que trilla el INFOTEP. Caminos que nos han conducido a proveer servicios no solo a beneficiarios vinculados al mercado laboral, sino también a sectores que por motivos muy diversos están al margen de la dinámica formativa fomentada por la asociación entre el INFOTEP, las organizaciones de trabajadores y el empresariado.

En ese contexto, estamos en proceso de potenciar la formación no presencial, incrementar el número y calidad de los talleres móviles y hacer hincapié en la actualización académica del personal docente. Nuestro objetivo es afianzar el liderazgo institucional enel diverso y necesario campo de la formación técnico profesional.

Cuando se echa una mirada a los estimulantes indicadores del sector zona franca, no podemos menos que pensar cuáles muchas otras cosas que las ya hechas podemos emprender juntos.

Recordemos que desde 1992 existe entre el INFOTEP y la Asociación Dominicana de Zonas Francas (ADOZONA) un convenio que consigna la obligación de dedicar el 35% de los aportes de ley entregados por el sector a la capacitación, entrenamiento y especialización de los trabajadores y trabajadoras de las empresas de zona franca.

La razón de este acuerdo es obvia: la necesidad de las empresas de zona franca de contar para sus trabajadores y trabajadoras con programas de adiestramiento que eleven sus capacidades laborales y se adecúen a los retos de competitividad impuestos por la economía global.

Ejecutado por el Servicio de Apoyo a la Productividad del INFOTEP, el programa tiene alcance nacional a través de sus gerencias regionales Central, Norte, Sur y Este.  Su funcional estructura consta de seis comités locales y un comité nacional coordinador, encargados de hacer fluida la relación bilateral.

Dadas las especificidades sociodemográficas de las regiones en que operan los parques de zona franca, la oferta formativa derivada del convenio incluye diferentes modalidades. Así, tenemos el programa de capacitación puntual, que puede ser abierta, cerrada o externa. Es decir, reunir, en el primer caso, participantes de varias empresas; para un grupo de una sola empresa en el segundo, o en los centros formativos, en el tercero.

Está también el programa de capacitación y certificación por competencia, que permite a la empresa potenciar las capacidades de su capitalhumano mediante la determinación, evaluación, ejecución y certificación de sus competencias laborales. Su meta es conformar una estructura de capacitación y entrenamiento permanente.

Por último, está el programa de gestión del conocimiento o asistencia técnica, enfocado en la promoción de una cultura de mejoramiento continuo a través de los llamados círculos de aprendizaje y otras dinámicas que generan flujos de conocimiento que mejoran la organización y, por ende, la productividad.

Dijimos hace un momento que la oferta curricular actual del Infotep se caracteriza por la permanente actualización de sus contenidos. De ahí que en el marco del convenio INFOTEP-ADOZONA, se hayan diseñado programas dirigidos a subsectores específicos tales como los clústeres de Call Center y BPO, de Dispositivos Médicos y Eléctrico y Electrónico.

Los resultados no pueden ser más auspiciosos. Gracias a las acciones formativas del INFOTEP, las empresas participantes han logrado reducir sus inventarios, tiempos de entrega y sobreproducción; eliminar los desperdicios; un cambio en la cultura productiva y, consecuencia de ello, una mayor satisfacción de los clientes.

Grosso modo, la capacitación y el entrenamiento del personal de las empresas de zona franca son el plus añadido por el convenio INFOTEP-ADOZONA a la actividad del sector, cuya importancia en la economía es reconocida por todos.

Si bien los aquí presentes manejan con holgura los datos del sector, quiero resaltar algunos que reafirman su dinamismo. En el primer trimestre de este año, las empresas de zona franca exportaron bienes por un valor de 1.321 millones de dólares. En términos porcentuales, este monto presenta un aumento de 4.8 respecto al mismo período de 2016, según el Consejo Nacional de Zonas Francas de Exportación (Cnzfe), que cita cifras del Banco Central.

En ese mismo período, se establecieron en el país 25 nuevas empresas, pasando de 629 a 654. También entre enero y marzo de este año, el CNZFE aprobó 21 nuevos permisos de instalación, con una inversión aproximada de 3,820.5 millones de pesos. Se espera que estas nuevas empresas creen 2,167 puestos de trabajo.

Se espera que el año que discurre concluya con indicadores mucho más satisfactorios que los de 2016. En ese año, la capacidad de empleo de las empresas se incrementó 1.2%, un aumento concordante con el mayor número de empresas operando bajo este régimen especial. En términos numéricos, se crearon 1,801 puestos de trabajo, según informa el Banco Central.

El análisis del comportamiento histórico de las zonas francas acredita no solo sus mayores y mejores resultados económicos, sino que también radiografía el proceso de mutación del sector a tenor de los cambios producidos por las tecnologías en el mercado global.

Un estudio reciente titulado “Sobre la estructura productiva y dinámica exportadora de la industria manufacturera de la República Dominicana”, de la autoría de Juan Tomás Monegro, viceministro de Desarrollo Industrial, y Carlos Gratereaux, especialista sectorial, ambos sirviendo al Ministerio de Industria, Comercio y Mipymes, revela los cambios experimentados por el sector desde 1991 a la fecha.

En efecto, dicen los autores, en 1991 más del 60% del valor agregado por las zonas francas correspondía “a las actividades de fabricación de productos textiles y prendas de vestir”. Veintidós años más tarde, en el 2013, “estas actividades sólo representaban cerca del 25% del total”.

Lo que estos porcentajes revelan es un cambio en el paradigma exportador del sector de zonas francas yen el perfil de las empresas asentadasen nuestros parques. Ya no prima la confección –cada vez más acaparada por la China y otros países del sudeste asiático–, sino otros renglones productivos queexigen tecnologías cada vez más sofisticadas.

En su ya citado ensayo, Monegro y Gratereaux plantean que las actividades tradicionales de zona franca –textiles y prendas de vestir— han dado paso a la fabricación de “productos eléctricos, artículos de joyería y conexos, productos farmacéuticos, fabricación de productos médicos y quirúrgicos, manufacturas de calzados y manufacturas de tabaco”.

“Dichas actividades de ‘Otras zonas francas´” –añaden—“representaban al 2013 más del 75% del valor agregado del sector de Manufactura de Zonas Francas”.

Para que sea sostenible y competitivo, el giro en el modelo productivo exigedisponer de una mano de obra calificada, capaz de producir con estándares de calidad internacionales. Esa calificación sólo es obtenible mediante un proceso de formación continua del capital humano.

El INFOTEP está en plena capacidad para suplir la demanda de formación académica al personal de zona franca. Hemos venido haciéndolo durante los 25 años de vigencia del acuerdo con ADOZONA, que ha beneficiado, hasta el año 2015 y solo en la región norte, 359,165 trabajadores y trabajadoras. En el 2016, sobrepasamos con creces nuestras propias metas, tanto en el número de acciones formativas, como en el de las horas de instrucción y de participantes.

Dada la alta demanda, en este último año, el Departamento de Gestión de Programas Especiales de la Gerencia Regional Norte debió agregar a la agenda docente INFOTEP-ADOZONA, 20,000 horas de instrucción y 354 acciones formativas, y a aceptar en las aulas a 5,585 participantes adicionales.

Llegado a este punto de mi exposición, quiero poner el énfasis en un aspecto de crucial importancia para el desarrollo del país: la cooperación y entendimiento de las entidades estatales y gubernamentales con el sector empresarial.

Por ello, y dada la prolongada colaboración del INFOTEP y el sector de zona franca, invito a todos ustedes a explorar nuevas posibilidades de acción conjunta que amplíen tanto el currículo como el universo de participantes.

Estoy convencido, sin el menor atisbo de duda, de que la alianza entre el INFOTEP y ustedes solo puede producir beneficios: una elevación de la productividad, calidad mejorada, reducción de costos de producción y mejor ambiente laboral.

Nuestro compromiso institucional es claro. Respondiendo a las políticas sociales del gobierno del presidente Danilo Medina y a su proyecto de nación justa y equitativa, trabajamos sin descanso para ampliar el horizonte de nuestros hombres y mujeres.

Ya en el 2011, cuando recorría el país como candidato, el presidente Danilo Medina insistía en priorizar la elevación de los índices educativos de la población dominicana. En numerosas ocasiones ha afirmado que la educación es el otro nombre de la libertad.

La formación técnico profesional, que es parte de pleno derecho del sistema educativo público, participa de esa función liberadora a la que alude el mandatario. Aumenta la empleabilidad, optimiza la capacidad y productividad laboral y permite acceder a empleos dignos.

Con la alianza entre el INFOTEP y el sector privado, salimos ganando todos: el país, porque ve acrecentada la competitividad de su sector productivo y, por ende, la creación de riqueza; los empleadores, porque pueden contar con el capital humano que los ayude a concretar sus proyectos de mayor desarrollo; y los hombres y mujeres trabajadores, porque a través de la formación técnico profesional amplían sus posibilidades socioeconómicas.

Muchas gracias!

Rafael Ovalles,

Director General INFOTEP

7 de julio 2017