De la Odebrecht, el pueblo espera algo más que dinero

José Alfredo Espinal

Caribbean Digital

SANTIAGO, RD.- El avance de los 30 millones de dólares que la empresa Odebrecht habría pagado a la Procuraduría General de la República como parte del acuerdo de 184 millones de dólares al que había llegado en virtud de los sobornos que la empresa brasileña admitió haber pagado en República Dominicana, no es el final que espera la mayoría del pueblo que, cansado por la impunidad por los hechos de corrupción, no tiene planes de echar a un lado este escándalo.

Los ciudadanos exigen a las autoridades y a la cuestionada comisión que investiga los sobornos de la Odebrecht que caigan aquellos involucrados en los actos dolosos.

Simplemente pagar por un crimen de esta naturaleza no es suficiente, afirman muchos dominicanos incrédulos en que los culpables sean castigados con cárcel, como un ejemplo para los demás que intenten abusar de los recursos del estado.

El presidente Danilo Medina, el Ministerio Público, y la Comisión que investiga los sobornos, tienen la obligación moral ante el país de aplicar todo el peso de la ley contra aquellos políticos, funcionarios, gente de la clase empresarial u otro ciudadano que pudieran haber estado envueltos en este y otros casos de corrupción.

Con la marcha contra la impunidad y la corrupción que el pueblo masivamente respaldó hace poco envió un mensaje a las autoridades gubernamentales y judiciales que no permitirá que con simples interrogatorios y acuerdos de pago el caso de la Odebrecht llegue a felices términos.

Más que el dinero devuelto a la Procuraduría, el pueblo tiene el derecho a saber los nombres de las personas envueltas en este escandaloso hecho de corrupción, caiga quien caiga, como han dicho algunos funcionarios palaciegos.

…es recordado por mucha gente que en el pasado cuando un niño llevaba algo a la casa que no era de su propiedad el padre o la madre del menor le cuestionada acerca de su procedencia. El menor, entonces, si no podía justificar lo que llevó a casa tenía que, primero, decir dónde lo encontró y segundo, devolverlo a su dueño. A pesar de haber cumplido con esta orden emitida por sus padres, el menor no era absuelto del hecho. El niño era castigado con la famosa (pela) y en otros casos era puesto de rodillas por horas.

En resumidas cuentas, a pesar de que están regresando el dinero a la Procuraduría, el pueblo dominicano confía que los responsables de los sobornos de la Odebrecht sean castigados de acuerdo a lo sucedido, caiga quien caiga. Carajo…