Aunque la situación está insoportable a los perredeistas que no se crean ganadores

POR RAMON MARTINEZ

Especial/Caribbean Digital

NUEVA YORK.-  Cierto, para la mayoría de las personas, especialmente las que no reciben ayuda del Estado Dominicano la situación socio-económica

está peor, mucho peor que antes, sencillamente inaguantable.

Hipólito y Danilo. Archivo.

En estos 12 años, pero especialmente en los últimos dos cuatrenios por toda la República Dominicana la pobreza, la delincuencia,  la deuda externa, la

desesperanza y el crímen se han triplicado.

El desempleo, y las quiebras de numerosas  pequeñas,  medianas y grandes, se ha incrementado de forma alarmante perjudicando a una gran cantidad

de personas o familias que han visto desaparecer sus ahorros logrados en base al trabajo honrado.

El enriquecimiento o poder económico que exhiben la mayoría de los funcionarios compiten con las fortunas que tienen los nuevos empresarios, muchos

ligados al fomento de las acciones  que promueven los  sectores del «Quinto Poder».

La ola de robos, o asaltos está incontrolable, los asesinatos por encargo -que ya es un trabajo que deja mucho dinero- crece por todos lados, y el país

muchos comparten la idea de que el mal olor de los actos de corrupcción en la presente gestión se  siente en la mayoría de las oficinas públicas.

Los servicios de agua potable, de electricidad, sanitarios o educativos poco han mejorado y en el peor de los casos han empeorado afectando el avance

de todo Dominicana y el eterno deseo de mejoría que añoran los dominicanos.

Aunque hay numerosas plazas comerciales, elevados, metro y otros proyectos que dan la imágen de que estamos avanzando y que hay una economía sólida,

el dinero cuando logramos obtenerlo se parece al viento que en la mayoría de las veces nos toca, no lo podemos retener y se nos va sin poder cubrir  las

necesidades básicas.

Pocos creen en los integrantes de la policía,  la justicia, en el gobierno central y otras  entidades  para que el país de un giro de paz, avance, y estabilidad

social.

Pareciera que el escenario  es perfecto para palpar, sentir o comprobar  que los días del Partido de la Liberación Dominicana en el poder estan contados.

De acuerdo a los numerosos datos que recogen el sentir del pueblo, el Partido Revolucionario Dominicano e Hipólito Mejía tienen amplias posibilidades de

ganar las elecciones mayo del próximo año.

Pero los perredeístas olvidan que en los últimos períodos los votantes no han escogido por ellos mismos, se han  seleccionados personajes que sólo ha

querido el dueño del país.

A esto se agrega, que el PRD no está consciente, ni se imagina del poder demoledor, o maquiévilico que tiene el enemigo que esta enfrentando y cuya batalla

central se observará en mayo del próximo año.

Parece que olvidaron lo que le pasó en el 2010, donde el Partido de la Liberación Dominicana usó todo el poder, sus peligrosos amigos e influyó en todo para

«ganar»  todos los cargos electorales disputado en las pasadas elecciones de medio término.

Ahora será peor. El Partido de la Liberación Dominicana con la retención del poder busca evitar que no haya posibilidad de «castigo para sus corruptos»,  que el

poder económico que disfrutan sus principales  dirigentes caiga en otras manos y que el Partido Revolucionario Dominicano vuelva al poder.

Esta vez usaran todos su arsenal que incluye  morteros de mediano y largo contra Hipólito Mejía. Inculcaran a los «sin partidos» la idea del temor de que vuelve

el pasado, el desastre. Y quizás  sea  verdad. Aunque haciendo acopio al refrán popular, es probable que  el tiempo ido fue mejor.

El oficialísmo obligará a los seguidores del actual presidente, a los que cobran sin trabajar, es decir a los más de 847 mil 151 beneficiarios que usan tarjetahabiente,

a que  además de sus familias busquen al menos 5 votos para Danilo Medina.

Pero es probable que el papel más preponderante en la retención del poder y la victoria de Danilo Medina lo jugaran los integrantes del «Quinto Poder» quienes usaran

su arma perfecta : La amenaza, la presión, la compra de conciencia y quizás el crímen para que no se vote por un «cambio de gestión» ya que esto podría peligrar su

vigencia y por ende sus emporios económicos.

Es probable que en el 2012 haya una abstención provocada, porque es mejor «estar vivo» que votar por alguien que no se sabe si ha cambiado o si repetirá el mismo

librito.

En fin, a los perredeístas, que no se crean ganadores, porque tienen el enemigo más poderoso que ha tenido ese partido en lo que lleva de fundación.