«La casa ha sido tasada y va a ponerse en el mercado en cuestión de días». Con estas palabras revelaba una fuente cercana al exmatrimonio formado por Angelina Jolie y Brad Pitt que van a deshacerse del Château Miraval, situado en la francesa Correns.
Esta no es una más de las propiedades de las que se están deshaciendo desde que se conociera que iniciaban los trámites de divorcio, ya que se trata del lugar donde, el 23 de agosto de 2014, celebraron su enlace.
Por el momento no ha trascendido la cantidad que estarían pidiendo, pero sí se sabe que ellos desembolsaron 60 millones de dólares en 2012 por su compra.
Mientras tanto, las investigaciones para determinar en qué terminos debe de darse la custodia de los seis hijos de los Brangelina sigue su curso. La semana pasada conocíamos que el FBI estaría interrogando a Angelina y sus hijos con el fin de despejar esa duda con la que carga Brad desde el principio, de un presunto episodio violento con su hijo Maddox como protagonista.
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