A los 41 meses de la tentativa de asesinato contra mi hijo Jordi Veras

Por: Ramón Antonio Veras

Especial/Caribbean Digital

SANTIAGO, RD.- 1.- Mi condición de padre de Jordi Veras, me impone mantenerme al tanto de todo lo que se mueve alrededor del caso relacionado con su persona, que tiene su origen en la tentativa de asesinato de que fue objeto el 2 de junio de 2010, y que hoy se cumplen 41 meses.

Negro Veras. Archivo.
Negro Veras. Archivo.

2.- Por formación ideológica y familiar, me repugna la injusticia, sin importar contra quien se ponga en práctica; y más contra un ser humano que, como mi hijo Jordi, ocupa un lugar especial en mi corazón.

3.- Desde el mismo momento que se ejecutó la acción criminal contra Jordi, dije: quien se identifique con la criminalidad, que haga causa común con los que se asociaron para matar a mi hijo; pero los hombres y mujeres de bien del país de seguro que rechazan ese acto contra Jordi, quien resultó ser víctima del crimen organizado, por defender la justicia y ejercer la profesión de abogado con sentido de honestidad, lealtad y responsabilidad.

4.- En nuestro medio hay personas que a cambio de dinero ejecutan cualquier acción, sin importar lo deleznable que sea; hasta promover la puesta en libertad de aquel que pagó para asesinar a Jordi.

5.- El que aportó el dinero a los sicarios para asesinar a mi hijo, no cesa en su afán de hacer maldad. Desde el recinto carcelario donde cumple condena por mandar a asesinar a Miguelina Llaverías-, sigue en sus maquinaciones diabólicas utilizando a terceros, que hoy están a su servicio a cambio de dinero, para realizar acciones macabras contra personas decentes y correcto proceder.

6.- Una sociedad civilizada no puede estar a merced de la voluntad de quien utiliza el dinero para pagar sicarios. El que pagó para matar a Jordi, fue el mismo que puso el dinero en manos de quienes llevaron a cabo el operativo criminal contra Miguelina Llaverías.

7.- La familia dominicana quiere vivir bajo un estado de seguridad, pero en estos momentos semejante aspiración está frustrada por aquellos que creen y practican el crimen. La asociación que se formó para asesinar a Jordi, constituye un peligro social; la sociedad debe utilizar la justicia para alcanzar la paz, y liberarse de quienes no tienen condiciones para convivir en un medio social decente y civilizado.

8.- El aplazamiento de las audiencias en veinticuatro ocasiones, no me coloca en estado de desesperación, porque sé que, no importa el tiempo, se ha de imponer la justicia; la sanción contra los que pretendieron eliminar físicamente a Jordi, será un mensaje contra aquellos que quieren imponer el miedo por medio del crimen.

 

 

 

Santiago de los Caballeros, 2 de noviembre de 2013.